El culto
El culto: Hulk Hogan
Su popularidad entre los niños fue tan grande que apareció en varias películas de los 90 que se repetían infinidad de veces en época de vacaciones o días de fiesta.
El Culto: Hulk Hogan
Para un niño nacido a principios de los 90, el glorioso circo de la lucha libre profesional era visto sin malicia. Pero para un adulto la realidad encarnada por Hulk Hogan era otra.
Soy Leyenda: Michael Jordan
Michael Jordan no ha hecho nada destacable últimamente, pero nos da igual: siempre es buen momento para hablar del que muchos consideran el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos.
Soy Leyenda: Ronaldinho
Ronaldinho fue un futbolista como ningún otro, un espectáculo por excelencia. Por su contagiosa exuberancia, carisma y descaro, "Dinho" fue el último jugador de su especie.
Soy leyenda: Edgar Davids
Edgar Davids fue un centrocampista defensivo que hablaba con su mente, no tomó ninguna mierda y se convirtió en un icono gracias a sus llamativas gafas. Su actitud y su fútbol lo hacen un jugador de leyenda.
El Culto: OJ Simpson
"El Culto" regresa este 2017 con un hombre que por un tiempo estuvo entre los deportistas más populares de los Estados Unidos, pero que se convertiría en un escándalo nacional de proporciones mayores.
Soy leyenda: Mike Tyson
Nadie ha logrado igualar ni remotamente la precocidad de esta bestia, que se coronó como campeón de los pesos pesados con solo 20 años. Es uno de los más temidos y controvertidos pesos pesados de todos los tiempos, y cumple 50.
El Culto: Ruud van Nistelrooy
En "El Culto" de esta semana rendimos homenaje al irreverente y magnífico goleador holandés, Ruud van Nistelrooy.
Manny Pacquiao, el ídolo filipino de las dos caras
Manny Pacquiao es el deportista de las dos caras, y su carrera en el boxeo se ha visto empañada por los elementos más oscuros de su personalidad. Es un hombre de contrastes, y esta es su leyenda.
El Culto: Michael Vick
La prometedora carrera de Michael Vick se vio afectada, para siempre, por el macabro hallazgo en la parte trasera de su casa en Virginia.
El Culto: David Seaman
David Seaman era conocido como una piedra frente a la portería, pero también por su bigote. Más que ser vello facial, servía como una metáfora para el hombre.