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Así se logró la filmación de Tyler Fernengel haciendo BMX en un estadio abandonado

La semana pasada, Red Bull lanzó un video de Tyler Fernengel haciendo BMX en un estadio abandonado. Hablamos con uno de los responsables de construir las rampas que hicieron esta hazaña posible.
Ryan Fudger / Red Bull Content Pool

El video de Red Bull con Tyler Fernengel haciendo BMX en el abandonado Silverdome de Detroit ha llamado bastante la atención estos días, y con justa razón, es una producción realmente única. Become Co, una compañía de Portland con bastantes riders de BMX actuales y del pasado en su Staff, fue contratada para construir las rampas, rieles y bordes requeridos para la filmación. VICE Sports platicó con KC Badger de Become Co para encontrar cómo lograron realizar lo que Tyler tenía en mente.

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VICE Sports: ¿Cuánto tiempo estuvieron ustedes trabajando en el Silverdome?

Badger: Cinco días. Cada mañana nos encontrábamos en el lobby a las 7 a.m. y le echábamos unas 12-14 horas de trabajo. Básicamente estábamos construyendo con un día de anticipación de la agenda de filmación. Así que construíamos lo que Tyler iba a montar al día siguiente. Ya que se trataba del Silverdome y va a ser demolido, podíamos usar cualquier cosa que quisieramos y no teníamos que limpiar.

VS: ¿Ayudó que ustedes también sean riders de BMX?

Básicamente nos trajeron aquí por esa razón. Para Tyler, como atleta, podría confiar en nuestras rampas y cómo fueron construidas. Tener a alguien que sí practica BMX es diferente que tener solamente a alguien que construye muebles. Así que Tayler tuvo a algunos de los mejores constructores de rampas del mundo, y no hubo preguntas. Estábamos pensando en las cosas de la misma forma que él lo haría.

VS: ¿Quién tuvo la idea de las líneas y dónde pasaría Tyler?

Hicieron un par de recorridos del lugar para entender y detallar lo que Tyler iba a hacer y cómo lo iba a realizar. Se hizo un plano en el sitio. Luego llegamos y resolvimos cómo hacerlo. Hicimos factible lo que Tyler tenía en mente, y, queríamos mantenerlo lo más naturalmente posible y fusionarlo con la construcción lo mejor que pudiéramos. Los patinadores y los riders del BMX siempre están viendo las cosas de forma diferente. Estaríamos caminando por las escaleras y pensando que un pasamanos sirve para un buen grind. Tyler tuvo esa oportunidad.

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VS: Pues, parece que es un lugar interesante para pasar unos días.

El lugar es una locura. Entras y luego todo es muy apocalíptico. Es super silencioso, y escuchas el viento recorriendo el lugar. Todo tenía mínimo unas cuatro pulgadas de agua porque colapsó el domo y había estado lloviendo. Había sombra y escombros en las escaleras y esquinas, y el así que el agua no se puede evaporar. Había este moho loco por todos lados, y realmente no querías tocar nada. Probablemente haya traído conmigo algún hongo raro de ahí.

También fue nostálgico para Tyler. Creció en Detroit y solía hacer motocross en el Silverdome. Así que lo vio de todos los ángulos. Fue como espectador y como competidor y luego pudo hacer unos rides ahí cuando ya todo estaba dilapidado. Entró por el mismo tunnel que pasó Barry Sanders. También era la primera gran producción de Tyler con Red Bull y eso puso mucha presión para que hiciera un buen trabajo. Por supuesto, lo hizo increíble.

El bar-spin de más de 6 metros de Tyler. Foto Ryan Fudger / Red Bull Content Pool

VS: ¿De dónde despega para el gran salto?

Es un viejo restaurante. Parece que solamente cerraron las puertas un día, empacaron, y se fueron. Había botellas sin abrir de cerveza y licor. Pero eso solo le agregaba carácter. Era algo genial, como ser un niño de nuevo invadiendo una casa abandonado. Podíamos hacer lo que quisiéramos. Estábamos lanzando platos del restaurant hacia el campo. Tyler rompió una de esas ventanas gigantes.

VS: Vi el crash reel de su intento del gran salto. Luce como una horrible caída.

Literalmente pensamos que había muerto. Hizo una pequeña sobre-rotación, y eso lo mandó botando a la rampa y luego se fue a dar contra una silla. No había nada que pudiera frenarlo de que esa silla le perforara el estómago. Todos estaban en completo silencio. Un par de nosotros volteó la vista. Luego comenzó a gritar con toda la fuerza de sus pulmones. Podías escuchar el eco por todo el estadio. Luego se para, y creo que el mejor escenario es que se hubiera roto las costillas. Puso sus manos sobre su cabeza, y todos nos quedamos de, mierda, está caminando.

Fuimos ahí a platicar con el y dijo, sí, denme 20 minutos y lo intentaré de nuevo. Y todos nos quedamos, qué carajos, suponemos que es la ventaja de tener 19. Se levantó la camisa y todo su costado era una enorme frambuesa. Pensamos que la filmación había terminado. Todos colectivamente habríamos aceptado que la filmación había terminado. Pero él no. Luego aterrizó el salto y terminó la filmación. Luego de eso, fue el momento de la celebración.