Tigres de Quintana Roo
En febrero pasado, Fernando Valenzuela anunció que encabezaba un grupo de inversionistas para adquirir a los Tigres de Quintana Roo de la Liga Mexicana de Beisbol, uno de los equipos más importantes del beisbol mexicano que amenazaba con desaparecer por falta de recursos. Hoy, el legendario Toro no solo funge como propietario, sino también como una inspiración para los jóvenes lanzadores del equipo.Y es que, mientras el plantel principal de los Tigres disputa la temporada de la Liga Mexicana de Beisbol, los peloteros más jóvenes de la organización están en Hermosillo, Sonora, donde se les organizó un campamento para trabajar en su desarrollo.
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Y allá precisamente, en Hermosillo, es donde está Fernando Valenzuela, quien decidió acudir al campamento para ayudar personalmente a los jóvenes.Desde que el Toro adquirió la franquicia de los Tigres, dejó clara su intención de hacer algo por el beisbol de México, del cual salió procedente de los Leones de Yucatán y de los Mayos de Navojoa rumbo a Estados Unidos a una edad muy joven en 1979,cuando fue vendido a los Dodgers de Los Angeles. Desde entonces, Valenzuela no había podido regresar a México a contribuir, y ahora que es propietario de un equipo, trata de enseñar a los más jóvenes y transmitir sus experiencias.