Rusia: ¿Villanos o víctimas? | ES | Translation

Hillary Clinton reconoció hace algunos años que Sergey Lavrov —en algunas ocasiones— la sacó de sus casillas. La virtual nominada del partido Demócrata para las elecciones a la presidencia de Estados Unidos es una de las personas que ha lidiado con el hombre que se encarga de dirigir los asuntos exteriores de Rusia. Un hombre de poder.

Un hombre con convicciones, fan de los deportes, coleccionista de armas blancas y fan de cortar leña como pasatiempo es quien defiende a su país a través (o como excusa) del futbol.

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Sergey Lavrov, Ministro de Asuntos Exteriores, firmó hace unos días un comunicado que contenía declaraciones provocativas contra el gobierno de Francia.

"La instigación de ánimos anti-rusos en torno a la participación de nuestra selección en la Eurocopa puede dañar el clima de las relaciones ruso-francesas". Lavrov consideró que sus compatriotas estaban siendo blanco de ataques públicos, juzgados, señalados y culpados por la violencia que se ha presentado en la Eurocopa. Algunos de ellos ya fueron deportados.

"Muchas personas, sobre todo las que obtienen información a través de los medios del Estado (en Rusia), dicen en muchas ocasiones que son parte de una campaña anti-Rusia desde el Occidente. La sociedad apoya al presidente", comenta en entrevista Gabrielle Tétrault-Farber —periodista rusa con base en Moscú— cuando se le cuestiona sobre la percepción que se tiene desde esta parte del mundo de su país y las polémicas que se han desatado entorno al deporte y la política, así como los supuestos actos de corrupción para obtener el Mundial de 2018.

Previo a su debut ante Inglaterra en la actual Euro, las imágenes de televisión mostraron que aficionados rusos causaron destrozos y violencia previo a su primer partido en una batalla ante los ingleses y posteriormente —al interior del estadio— no tuvieron un comportamiento apropiado. La UEFA amenazó con expulsarlos del torneo.

En Moscú se miran como víctimas mientras que en Occidente se les acusa.

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The Neo Cold War. Cold War II. Cold War Redux. Cold War 2.0 y Colder War. La Nueva Guerra Fría. El geopolítico Joseph Stroupe fue el primero en hablar de la nueva batalla entre Rusia contra las naciones de occidente, ¿el motivo?, la atribuyó a la batalla de los recursos energéticos. La primera manifestación, según los especialistas, fue en el 2007 durante un congreso de seguridad en Múnich, donde el presidente ruso Vladimir Putin reclamó a los Estados Unidos la "unipolaridad" que busca del mundo.

¿El futbol representa una nueva manera de presentar las ideologías políticas del mundo?Así ha sido por mucho tiempo y eso continuará ocurriendo, responde Gabrielle Tétrault-Farber.

Antes de ser depuesto y sancionado por el comité de ética de FIFA en octubre pasado, Joseph Blatter dijo en Moscú: "Si Estados Unidos organizara el Mundial 2022, la crisis de FIFA no habría existido y nadie estaría señalando ni criticado a Rusia". El deporte más popular del mundo 'dio la espalda' al Occidente y permitió que Medio Oriente, así como el rival histórico de ellos, Rusia, organizaran el Mundial.

Desde la elección de Rusia como sede del Mundial 2018, se han presentado un vendaval de acusaciones contra la nación que dirige Vladimir Putin: sobornos, compra de votos. "Es una campaña que viene desde Occidente", ha dicho Putin en muchas ocasiones. Ahora, en la Eurocopa son los más señalados por el tema de la violencia y el Ministro de Asuntos Exteriores es quien ha salido a la defensa. Calificó la actuación de las autoridades francesas como "inaceptable". Los enfrentamientos entre Rusia y Francia no empezaron con el futbol, pero llegaron hasta ahí. Desde el golpe de Estado perpetrado en Ucrania, Francia se ha embarcado en una guerra de declaraciones contra Moscú.

"No podemos hacer la vista gorda sobre el hecho de que los franceses están tratando de ignorar las acciones totalmente provocadoras de seguidores de otros países" comentó Sergey Lavrov. Hasta el momento se han detenido a 43 rusos por motivos de violencia en la Euro. "No entiendo cómo 200 de nuestros aficionados hayan podido moler a palos a miles de ingleses", declaró Putin el viernes pasado, ironizando sobre la culpabilidad que les achacan a sus fans y luego echándose a reír.

La violencia no es una novedad en su futbol. De acuerdo con un informe realizado por el diario El Economista, Rusia fue la tercera nación con más actos violentos en el futbol europeo durante la campaña 2015-16 donde han estado involucrados clubes como Lokomotiv, Dynamo Moscú y el Zenit. Y no sólo eso, también es uno de los países donde hay más actos de racismo en sus estadios. "Es algo que pasa seguido y siempre", comentó hace algunos años "Hulk", jugador brasileño del Zenit de San Petesburgo. Se pueden contar entre diez y veinte casos (al menos conocidos) en los últimos ocho años.

Uno de esos clubes donde se presentan más actos racistas es precisamente el Spartak de Moscú, el equipo de los amores del ministro Sergey Lavrov. "Ni cuando perdió la categoría mi equipo… dejé de apoyarlos", comentó en una entrevista publicada en el sitio web. Muchos jugadores de color han manifestado la discriminación que han recibido de los fans de la institución.

¿Se puede medir el rechazo del Occidente a Rusia?

El porcentaje de la población que tiene una percepción negativa de Rusia se documenta así: 62 por ciento en Finlandia, 57 por ciento en Noruega, 42 por ciento en República Checa y en Suiza, 37 por ciento en Alemania, 32 por ciento en Dinamarca y en Polonia, 23 por ciento en Estonia, y 73 por ciento en Kosovo. Los datos son de un sondeo realizado por la Organización Internacional Gallub.

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El deporte debe tener algún significado para Rusia. Si no fuera así, no se entiende la inversión de más de cien mil millones de dólares en organización de eventos deportivos en la última década. La antigua Unión Soviética albergó: Mundial de Atletismo, Juegos Olímpicos de Invierno, Fórmula Uno, Mundial de Hockey sobre Hielo y en el 2018 recibirá el Mundial.

"Rusia está pasando por una crisis económica. La devaluación del rublo hace que sea complicado tener patrocinadores. No es el mejor momento para invertir en un mega evento, pero en términos generales la población confía en que tendremos una organización exitosa", dice Gabrielle sobre la percepción que hay en su país por la Copa del Mundo del 2018.

"Sabemos que será difícil que Rusia gane el Mundial, no tiene el mejor equipo, pero creemos que el torneo dará prestigio internacional", comenta la periodista.

Hace unos meses, en el evento de Soccerex que se desarrolló en México, el presidente del Comité Organizador del Mundial, Alexey Sokorin, aseguró que, "estamos abiertos a cualquier otro país para que sienta la fraternidad de nosotros, no importa que hayan leído, somos amigables".

También es cierto, por ejemplo, que la violencia en el futbol no es exclusiva de la Europa del Este o de Rusia. Tan sólo entre Inglaterra, Francia, España, Italia y Alemania, hubo más de 35 actos violentos relacionados con este deporte de acuerdo con los datos de El Economista en la última temporada. Además, si hablamos de racismo, un informe documentó recientemente que Francia (la sede de la Euro) tiene mayores registros en el planeta. La Comisión Nacional de Consulta sobre los Derechos Humanos del país detalló que las denuncias por este tipo de actos tuvieron un aumento de 22.4 por ciento el año pasado.

"La Copa del Mundo va a dar la oportunidad de que la gente vea a la Rusia real, no la Rusia de algunos periódicos británicos", dijo Sokorin en México.

El futbol se ha convertido en una nueva forma de diplomacia en el mundo. ¿Qué tan perverso es Rusia, qué tan víctimas son?