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Celebrando 99 años: "El Santo"

Rodolfo Guzmán Huerta se convirtió en "El Santo", y en ícono de la cultura mexicana.
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La lucha en México es más que un deporte, es una tradición, un arte, toda una cultura, que ahora es una parte importante del folclor mexicano, y si hay alguien a quien le debemos la popularidad que tiene la lucha libre en el país y en otras partes del mundo, es a Rodolfo Guzmán Huerta: El Santo.

Nacido en Tulancingo, Hidalgo, Guzmán se volvió luchador en los años 30, aunque no fue sino hasta la siguiente década que adoptó el nombre "El Santo", y fue entonces cuando su carrera ascendió.

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Hoy se cumplirían 99 años de su nacimiento, y durante su carrera en la lucha, "El Enmascarado de Plata" se convirtió en el luchador más conocido y querido por el público, sirviendo como inspiración para muñecos de plástico y una historieta para después hacer una transición exitosa a la pantalla grande, protagonizando al menos 50 películas, que si bien no son las mejores películas que se hayan producido en el país, hay que reconocer que hasta el día de hoy son ícono de la cultura popular mexicana.

Cintas como "El Santo contra las Mujeres Vampiro", o "Las Momias de Guanajuato" popularizaron el género , con la segunda siendo la película más exitosa, en la que actuó junto a "Blue Demon" y "Mil Máscaras", otros dos legendarios luchadores mexicanos.

En 1984 "El Santo" dejó ver su rostro al quitarse la máscara en un programa de televisión nacional, y días más tarde falleció de un infarto al miocardio mientras se presentaba en el Teatro Blanquita en la Ciudad de México. Cerca de diez mil seguidores asistieron a su funeral para despedirlo.

Como lo declaro Google al rendirle tributo con un doodle, "Su funeral fue uno de los más grandes en la historia mexicana, al que asistieron familiares, amigos y muchos de sus fans. Poco después, se erigió una estatua de 'El Santo' en Tulancingo, Hidalgo".

"El Santo" representaba la justicia social, por eso se convirtió en un héroe, en más que un deportista que intentaba esconderse en el anonimato, de hecho, fue justo el misterio que lo rodeaba fue lo que ayudó a elevarlo al estrellato.