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Cultură

Estrípers y trabajadoras sexuales nos dicen cómo sentirnos bien estando desnudos

Resulta que para sentirte cómodo sin ropa no necesitas tomar smoothies de kale y ejercitarte 16 horas al día.

Lola Frost, probablemente sintiéndose bien. Foto por David Denofreo.

Todos tenemos algo que no nos gusta de nuestro cuerpo. Tal vez, de niño, te ponías playera para entrar a la alberca o ya creciste demasiado y tus pantalones te quedan cortos. El punto es que los problemas relacionados con la imagen corporal pueden llegar en cualquier momento y muchas veces tienen poco que ver con la apariencia externa.

Resulta que, para sentirte cómodo sin ropa, no necesitas tomar smoothies de kale y ejercitarte 16 horas al día. Y nadie mejor que la gente que pasa mucho tiempo desnuda para comprobarlo.

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VICE se puso en contacto con personas que se desnudan por diversión y por dinero para saber su opinión sobre el poder, la jaula de piel y cómo sentirte cómodo con tu desnudez, incluso si estás frente a un montón de gente.

Foto por David Denofreo.

Tristan Risk, bailarina burlesque

VICE: ¿Cuál es la clave para sentirse cómodo estando desnudo?
Tristan Risk: No tiene nada que ver con cuántas abdominales o sentadillas hagas, o cuántas clases de pole dance tomes. Sentirte bien estando desnudo tiene que ver con el sentido de tu propio ser y solo ocurre cuando te amas y te sientes seguro de ti mismo. Yo me siento cómoda cuando estoy desnuda y me divierte que esa comodidad con mi propia desnudez haga que otras personas se sientan incómodas.

¿Siempre te ha sentido cómoda con tu desnudez o es algo que lograste con la edad?
Por suerte, desde pequeña me enseñaron a sentirme bien con mi cuerpo. Mis papás me llevaron a Wreck Beach [una playa nudista en Vancouver] cuando era pequeña y la desnudez era muy normal para mí. Todavía me encanta caminar desnuda y, aunque para los vecinos puede ser preocupante que ande desnuda por mi casa, no me da miedo que alguien me vea y me haga sentir vulnerable solo por mi desnudez. La primera vez que estuve desnuda frente a un grupo de gente fue un una clase de dibujo con modelo y, después de eso, de saber que la gente me ve desnuda y proyecta sus sentimientos hacia mí con su arte, empecé a sentir que compartimos una conexión especial. Sé que no todos se sienten tan cómodos como yo pero espero que mi felicidad y mi comodidad inspire a otros para que sientan lo mismo.

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¿Hay diferencia entre estar desnuda en público a estar desnuda en privado, en casa o con tu pareja?
En mi mente, no. No creo que esté bien hacer esa división. En ambos casos, estás compartiendo tu cuerpo con alguien más para hacerlo feliz y a ti también. No importa si vas a hacer un acto físico de amor o un acto de arte, sigue siendo un lugar personal y vulnerable. Cuando te sientas como en ese lugar, vas a sentirte mejor contigo mismo.

Como sociedad, ¿crees que nos preocupa demasiado la apariencia?
No creo que nos preocupe demasiado nuestro cuerpo. Las apariencias no son todo, son un reflejo de cómo somos por dentro.

Foto cortesía de Ninedoors.

Carole Brunette, estríper/bailarina burlesque

Si tuviera que subirme a un escenario y quitarme la ropa, ¿cómo le haría para agarrar valor?
Carole Brunette: Es gracioso, a veces creemos que ciertas personas ya "agarraron valor" en ese aspecto. Tendemos a proyectar eso a los demás y asumimos que se sienten bien con su cuerpo. Decimos "Oh, dios. Me encantaría tener la confianza de esa persona". Me da risa porque en realidad nunca sabemos si es cierto o no. Sí, llevo una vida en la que me quito la ropa y me siento cómoda con mi cuerpo pero, al mismo tiempo, me cuesta trabajo superar mis inseguridades, igual que todos.

¿Tienes un mantra o algo que te sirva para cuando no te sientes muy segura de ti misma?
No sé si tengo un mantra pero sí he tenido que salir a trabajar cuando no me siento lista o capaz. Por suerte, mi trabajo es flexible —hago bailes privados, no presentaciones en el escenario, así que no tengo que apegarme a un horario—. A veces tenemos que obligarnos a ir cuando, bueno, llegan esos días. He ido a trabajar con trajes blancos con el dragón rojo al asecho. A veces, las mujeres lo tenemos muy difícil pero no hay de otra.

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Tengo suerte de estar expuesta a tanta desnudez porque me recuerda los tipos de cuerpo que la gente ama. La gente ama todas las formas. Es normal. Todos tienen celulitis en alguna parte. Y aunque sigo tratando de perfeccionar mi cuerpo, veo a otras personas con cosas que se podrían percibir culturalmente como defectos y me doy cuenta de que todos tienen algo así. Me reconforta. Porque en realidad no es un defecto, es variedad.

Entonces lo mejor es no idealizar a la gente o imaginar que sí hay un cuerpo perfecto en algún lugar del mundo.
Sí. Y las mujeres con la que trabajo y que hacen bailes privados son de todas las edades y formas. Es fácil olvidar cómo luce desnuda la gente real. Por eso es tan importante el teatro, el arte, el burlesque, los téibols y los bailes exóticos. En esos lugares vemos cuerpos humanos reales e interactuamos con humanos reales. Nada de Photoshop. Cuando tengo que desnudarme frente a otra persona, me digo a mí misma: "Ok, a esta persona le va a gustar lo que ve". Está viendo mi cuerpo a través de sus ojos, no de los míos. No me va a juzgar igual que yo. De cierta forma, verme en el espejo es más difícil que dejar que alguien más me vea.

Velvet Steele, dominatriz

¿Te sentías cómoda con tu cuerpo antes de empezar a enseñarlo a otros?
Velvet Steele: Al principio, me costó mucho trabajo. Como mujer trans, después de todos los procedimientos que tuve que atravesar para convertirme en la mujer que soy, no estaba completamente lista para mostrar mi cuerpo. Casi siempre me dejaba los calzones. Pero llegó un punto en el que dije: "¿Qué estoy haciendo? Vine aquí para hacer ruido y sentirme orgullosa. Debería presumir mi cuerpo".

Me tomó un rato acostumbrarme a estar desnuda frente a otros. Pero ahora, como dominatriz profesional, si no puedo mostrar mi cuerpo con todos sus defectos y tengo que usar cosas para desviar la atención de la belleza natural, ¿entonces cuál es el punto? Me esfuerzo mucho para mantener mi cuerpo en forma, hago ejercicio, como bien, tengo mucho sexo y siempre sonrío. Es importante ser feliz.

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¿Algún consejo para los que nos aterra estar desnudos en público?
Empecé en el mundo del fisicoculturismo, en las competencias de figura. Como mujer trans, la clave es tener una buena actitud cuando estoy ahí con todas esas mujeres cisgénero, prácticamente desnuda, en bikini, con todo ese bronceado falso. No es fácil. Todos sentimos vergüenza. Todos sentimos culpa. Pero depende de cómo la manejes. Cuando te olvidas de ella, es más fácil quitarte la ropa. En especial si excitas a la persona indicada. Tú misma te prendes cuando ves que excitas a la gente. Me encanta saber que prendo a la gente y me encanta saber que sienten placer al ver mi cuerpo. Hay mucho poder en estar desnudo frente a un grupo de personas porque tienes toda su atención. La clave es saber dirigir esa atención. Sé que soy un producto. Me gusta. Creé este producto al convertirme en quien soy.

Foto cortesía de FubarFoto.

¿Amar tu cuerpo es algo que sucedió un día o fue un proceso más gradual?
Lola Frost: El viaje personal de aprender a aceptar tu cuerpo es un proceso diario. No es algo que se pueda lograr por completo. Porque tenemos una mente que se distrae y entra en contacto con muchos estímulos. Mi viaje personal como una desnudista profesional en los últimos diez años no empezó lleno de confianza. Siempre soy así de Equis, amo mi cuerpo. Pero decirlo no evita que lleguen pensamientos negativos. Pero la imagen que tienes cuando te ves en el espejo y la imagen que ves cuando alguien te toma una foto puede ser muy diferente. Verme a mí misma fuera del contexto de mis propios ojos fue muy liberador. Lo que pienso de mí es muy diferente a lo que se refleja.

¿Verse bien desnudo y sentirse bien desnudo son lo mismo?
Creo que es algo muy personal. Soy maestra de baile, de movimiento y de a veces de autoestima. La gente acude a mí porque busca guía en ese ámbito, por eso conozco muchos puntos de vista, sobre todo en los cuerpos que se identifican como femeninos. Muchos dicen "Quiero que me guste mi cuerpo. Como saludable. Pero no puedo. Se supone que debo amarme como soy pero no puedo". Y es muy doloroso para ellos. En mi caso, como bien porque tengo que hacer mis presentaciones. Más que verme bien, quiero sentirme bien.

¿Tienes algún consejo para aquellos que luchan con su propia imagen?
Verte bien es algo relativo. La belleza está en los ojos de quien la mira. A pesar de que tengo mis inseguridades, amo mi apariencia. Podría decir que estoy contenta con el 90 por ciento de mi cuerpo. Hay de dos, o lo superas o sufres. Todos los días. Pero es un sufrimiento muy básico. Tienes muchas otras cosas de qué preocuparte además de tu jaula de piel. Es difícil porque nos imponen la idea de que ser bello te hace valioso. Claro, hay partes de mi cuerpo que están desproporcionadas y no me gustan mucho pero no por eso me voy a sentir mal. Hace mucho decidí que prefería ser sana y capaz que ser hermosa y enfermiza. Me gustaría que todos pusieran su salud antes que su apariencia. Tenemos que amarnos, cuidarnos y dejar de escuchar a los que nos digan lo contrario. Y para eso, debemos regresar a lo más importante para nuestro cuerpo: cuidarlo.