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estadios fantasma

Entre fantasmas y altitud, el Hernando Siles es el estadio más temido de América

El Hernando Siles es temido por rivales debido a sus 3,600 metros sobre el nivel del mar, pero además, por la aparición de diversos fantasmas en sus gradas.
Foto: Pasión Futbol

El Estadio Hernando Siles de La Paz, es probablemente, el inmueble más temido que existe en toda Sudamérica. Sus 3,600 metros sobre el nivel del mar lo hacen un sitio donde los mejores del Cono Sur desean nunca jugar al futbol.

Los efectos de la gran altura de la histórica casa de la selección de Bolivia van desde insoportables dolores de cabeza, terribles mareos y vómito durante los encuentros, fatiga y falta de aire a la hora de hacer grandes piques. Ahí, todas las selecciones de CONMEBOL sufren para rasguñar al menos un empate. Jugadores como Lionel Messi han acabado vomitando en pleno partido producto de los efectos de esos 3,600 metros de altitud.

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Es uno de los estadios más viejos del mundo. Localizado en el barrio de Miraflores, fue inaugurado en el año de 1930 y lleva su nombre en honor al Presidente boliviano Hernando Siles quien tuvo su mandato de 1926 a 1930.

El Hernando Siles envuelve grandes historias deportivas, pero también, unas un poco más misteriosas. Adentro de ese estadio, hay almas que penan y que imploran auxilio. Es un sitio de terror para jugar futbol, y un lugar de profundo miedo para quienes se quedan solos y en la oscuridad en dicho inmueble.

"El estadio es temido no solo por la altura, sino por las almas que penan en la cancha, en los pasillos, graderíos y camerinos, aquí hay fantasmas que nos atemorizan a todos quienes trabajamos en este lugar", contó Boris Yangues, directivo de la Federación Boliviana de Futbol.

Foto: Tomada de Wikipedia

Según historias locales, hace 50 años existió un derrumbe en el estadio en el cual murió gran cantidad de gente. Personas corrían intentando salvarse de la catástrofe, bloqueados por bloques de cuerpos que fueron aplastados mientras otros se quedaban sin oxígeno presas de los amontonamientos.

Ese accidente ocurrió hace mucho tiempo, fue una mortandad, se cayó la general por exceso de gente y desde ahí creemos que esas almas penan y se quedaron en el escenario. Por eso creo que quienes vienen a jugar acá deberían temerle más, no por la altura y eso que les falta el aire

Los ruidos extraños se escuchan en todos lados del estadio y no han cesado pese a las inumerables ofrendas religiosas que han hecho personas que trabajan en el Hernando Siles. Cuando no aguantan más, varios de ellos han preferido renunciar a sus trabajos, otros más, no les queda más que acostumbrarse a la actividad paranormal que presente el lugar.

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En 2007, el hecho se acrecentó con una nueva estampida humana que dejó a una mujer muerta y a decenas de lesionados durante el encuentro que disputó The Strongest y Bolívar. La señora de 35 años de edad falleció cuando cerca de 50 personas intentaron ingresar al campo de juego.

Los hechos de la muerte fueron investigadas por la policía boliviana con la finalidad de descartar responsabilidades de los propios hinchas o bien, de la seguridad del estadio.

Este es un proceso que está en investigación, se ha estado tomando las declaraciones de mucha gente y queremos establecer, a través de ello, algún grado de responsabilidad en la organización de este hecho suscitado en el estadio

Los fantasmas en el Hernando Siles habían sido simples rumores y mitos urbanos entre la gente, sin embargo, todo cambió en 2014 cuando las cámaras de televisión captaron un supuesto fantasma durante el encuentro de Copa Libertadores entre The Strongest y Defensor Sporting de Uruguay.

En las imágenes difundidas por Fox Sports se ve a un hombre correr a toda velocidad entre la grada, traspasando personas que se encontraban sentadas y paradas viendo el juego para acabar perdiéndose su figura con el paso de la imagen.

Como es de esperarse, la historia de los fantasmas en el Hernando Siles de Bolivia han empezado a ser utilizados como un arma psicológica por parte de la selección local en sus partidos eliminatorios, generando mayor temor entre sus rivales.

Con esta historia, seguramente el Hernando Siles cambiará su status de ser un estadio temido a nivel local y regional, a un inmueble que dé pavor al mundo entero. Si jugar ahí ya era casi imposible para el cuerpo humano, ahora, con fantasmas y almas en pena lo será más.