FYI.

This story is over 5 years old.

Μodă

3 Cosas que he aprendido sobre el bádminton

Gracias a los zapatos de Kawasaki.

Kawasaki es una compañía de calzado danesa que se hizo famosa en los años 70 fabricando zapatillas para jugar al bádminton. Por raro que parezca, los únicos países en los que se toman ese deporte en serio son Dinamarca e Indonesia. Puedo entenderlo en este último, después de todo el deporte se inventó en India, pero la idea rubios guerreros vikingos jugamos a lo que es, básicamente, una versión amanerada del tenis, es una imagen terriblemente extraña que tuve que sacarme de la cabeza googleando “badminton” durante 30 minutos. Esto fue lo que averigüé.

Publicidad

1. Tom Selleck nunca jugó a bádminton en ninguno de sus films

No sé por qué, pero siempre me ha parecido que Tom Selleck sería un muy buen jugador de bádminton. Puede que sea por dar esa impresión de súper macho y, al mismo tiempo, de poseer una sensibilidad latente, pero creo que Tom sería un jefe en este deporte. No me cuesta ver su mostacho brillante por el sudor, y sus musculosos muslos tensándose para llegar hasta el volante, que devolverá al otro lado de la red con un solo movimiento de su diestra y fuerte muñeca… ¿Me lo parece o esto está empezando a parecer pornografía escrita por fans?

2. Los jugadores de bádminton pueden saltar muy, muy alto

¡Fíjate en esto! ¡Mira lo alto que llegan! La verdad es que mola mucho. Solo necesitaríamos un remake de Los blancos no la saben meter, pero con jugadores de bádminton, y una banda sonora hip hop, y tendráimos entre manos la última fiebre juvenil. Como el baloncesto, pero para europeos blancos de clase media.

3. Tiene su propio Hall of Fame

Debo aclarar que la idea de un Hall of Fame me parece una chorrada. ¿Es un sitio al que puedas ir de visita, algo así como una especie de largo pasillo en algún sitio? Y, de ser así, ¿qué hay? ¿Clones? No veas si es siniestro. Como un cruce entre El resplandor y ese libro de Robin Cook sobre un científico loco que clona un bebé que terminaba saliendo súper inteligente. Creo que hicieron una película en la que salía De Niro.

Bueno, el caso es que Kawasaki, por fortuna, ya no hace zapatillas de bádminton. Esto está muy bien porque de lo contrario podría acabar apoyándoles aterradores hombres-niño como este de aquí. No, en vez de eso fabrican bonitas zapatillas como esta:

¡Vete a comprarlas!