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FIGHTLAND

ONE Championship y la nueva forma de evitar la deshidratación en los atletas

Tania Pereda acompañó a Djatmiko Waluyo a Indonesia para su pelea en ONE Championship, y nos relata los nuevos protocolos de la promotora.
Todas las fotografías vía One Championship

Djatmiko Waluyo es el primer mexicano en formar parte de las listas de ONE Championship, la promotora más importante de Asia, en el evento Tribe of Warriors. Yo lo acompaño de esquina. Se fijaron en el perfil de mi compañero porque es mitad indonés y mitad mexicano. En Indonesia —sede de este evento—, hay pocos peleadores de MMA. Los peleadores conocidos y estrellas de la promotora comparten otra nacionalidad y viven en el extranjero.

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Todos los peleadores de la cartelera son pioneros en la nueva forma que ONE implementó para prohibir los cortes de peso radicales. "Los pesos en las categorías han sido modificados al equivalente real de peso pero las categorías siguen llamándose de la misma manera", nos explican los organizadores.

La categoría de pesos wélter establecida previa a esta modificación era de hasta 77 kilos, categoría en la que Waluyo pelea. Hoy tendrá que pesar menos de 84 kilos, un equivalente a la categoría peso mediano en el UFC. En esa misma división, Luke Rockhold de 1.90cm de músculo sobre músculo, gobierna sin problemas. En ONE Championship los pesos completos pueden llegar hasta 120.2 kilogramos, y en tal categoría no hubo modificaciones ya que pocos competidores alcanzan el límite. Las mujeres en peso peso paja, originalmente hasta 52 kilos, ahora pueden dar 54.5 kilos.

Los cuatro peleadores que se presentan en este evento en peso wélter son de dimensiones no tan distintas, solo uno más alto y delgado que los demás, Luis "Sapo" Santos, peleador brasileño con más de setenta peleas que por lo general suele verse mucho más musculoso. Evidentemente, esta norma le ha obligado a bajar músculo. Djatmiko Waluyo y Trestle Tan —su oponente— parecen de la misma estatura.

El 11 de Diciembre de 2015, Yang Jian Bing, un peleador de 21 años que se presentaría en el evento ONE Championship 35, murió en el hospital debido a una falla cardiopulmonar, tras haber dado el peso para el evento del día siguiente. No es la primera vez que fallece un peleador de MMA. Hay pocas casos en los que se aclare que las muertes de los peleadores tras una pelea fueron derivadas de la deshidratación a la que se sometieron, pero se conocen casos de peleadores que han sufrido consecuencias de por vida debido a la deshidratación extrema de sus cortes de peso.

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La deshidratación es uno de los errores más comunes que tienen los atletas al entrenar y al competir. Una situación que exceptuando los deportes de combate, todos los demás deportes evitan y monitorean para prevenir. Sin agua suficiente en el cuerpo, este carece de recursos suficientes para amortiguar los desechos tóxicos durante el ejercicio así que la fatiga llega más rápido, no se puede alcanzar un óptimo desempeño físico y los pensamientos se vuelven confusos y lentos. Los riñones, el cerebro, el corazón, el sistema linfático y nervioso sufren consecuencias debido a la deshidratación.

El cerebro se encoge cuando estás deshidratado y permite mayor espacio entre la cavidad craneana y este órgano. En casos de deshidratación severa y tras la rehidratación, el cerebro se hincha porque absorbe demasiados fluidos. Ambos escenarios hacen susceptible al cerebro a lesiones importantes, como contusiones y edemas. Un golpe a la cabeza tras este episodio sumamente estresante para el cerebro puede significar la diferencia entre un nocaut o un golpe menos dañino en una pelea.

Cabe aclarar que tras un episodio de deshidratación severa, el cuerpo requerirá aproximadamente tres días para volver a la normalidad. El día y medio que tiene un atleta de MMA para recuperar el agua y subirse a la jaula son apenas lo necesario para vencer los estados críticos en los que se encontraba el cuerpo.

Los cortes de peso son "fórmulas" inexactas y métodos experimentales que han ido haciendo la reducción de peso, únicamente para el pesaje, cada vez más dramática. Se juega a la vida y la muerte y sin siquiera haber entrado a la jaula.

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En lo personal mis cortes de peso son bastante leves. Lo máximo que he cortado son de 4 a 5 kilos combinando restricción de carbohidratos y deshidratación. Esa sed que nunca te permites experimentar en tu vida —hasta ese momento— es angustiante. Las chicas que compiten en 52 kilos (mi categoría) pueden pesar más de 60 kilos tras la deshidratación. He visto peleadores siendo cargados al hospital tras medir su peso en la báscula. Sin embargo muy pocos peleadores se arriesgan a estar en una categoría de peso natural sabiendo que el otro peleador llegará —como en el caso de los pesos pesados—, con hasta 20 kilos más el día de la contienda. Todo peleador quiere aprovechar la ventaja que unos kilos de más te otorgan en la pegada y el dominio.

Para evitar la deshidratación extrema —por lo menos en esta función—, tres días antes de este evento, todos los peleadores son concentrados en un Hotel, el NAM Center. Nosotros fuimos de los primeros en llegar.

Luego de darnos la bienvenida los organizadores, le piden Djatmiko que se suba a la báscula. Estaba doscientos gramos arriba, límite permitido para ese día únicamente.

Desde nuestra llegada nos entregaron horarios de cada prueba, entrevista, análisis y sesión de fotos para todo el fin de semana. Con la advertencia de que si uno de los peleadores no se presentaba a tiempo a algún evento establecido, se le sancionaría económicamente.

Dos días antes del evento, nos enviaron al hospital luego de las sesiones de fotos, entrevistas y video. Djatmiko tiene un problema visual de muchos años y les preocupaba su seguridad. Lo revisó un oftalmólogo y un especialista en retina. Además, le hicieron una ecografía y un estudio con pupila dilatada.

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Cada esquina —roja y azul— tenía un encargado al que había que acudir en cualquier situación extraordinaria. Los peleadores a los que se les pidieron pruebas médicas nuevas fueron asignados a una persona que se ocuparía de ellos y se aseguraría de sus traslados para que no perdieran sus citas.

Las pruebas de los ojos duraron más de dos horas y nos perdimos el horario para las pruebas de hidratación y pesaje. Como a todos los peleadores, se nos asignó un teléfono local exclusivo para la comunicación con la empresa y avisé que íbamos atrasados. La empresa insistió en que es primero la seguridad del atleta y nos permitieron retrasarnos por los estudios médicos.

A nuestra llegada al hotel, Djatmiko tomó la prueba de hidratación y el encargado nos explicó que el número máximo permitido que debe dar el refractómetro —aparato para la prueba—, es 1.024. La densidad del agua es de 1.000 en el refractómetro. Este aparato compara las sustancias con la densidad del agua y entre menor es el resultado, digamos 1.007 —uno de los resultados de un peleador— será mayor la hidratación. Cuatro o cinco peleadores fallaron el pesaje o la prueba de hidratación ese día.

Algunos fallaron solo el pesaje. Varios estaban un kilo arriba y un peleador peso wélter, dos. Los peleadores se veían más saludables, platicaban entre ellos o con sus esquinas, reían.

Un día antes del evento volvieron a medir el peso de todos. La prueba de hidratación era opcional para todos los que pasaron la anterior pero obligatoria para los que fallaron cualquiera de los dos análisis anteriormente. Dos competidores de una pelea estelar son los que mas tarde se sometieron a las pruebas. Dieron excusas y retrasaron la toma de muestras como si unas horas de diferencia pudiesen ayudarlos a alcanzar las cifras.

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Las pruebas de hidratación y pesaje se hacían al mismo tiempo, no había espacio entre una y otra. No hubo ceremonia de pesaje oficial. En la sesión de fotos se hizo un careo. Ninguno de los atletas perdió la cabeza, no hubo insultos ni faltas de respeto.

El día del evento miden la hidratación y toman el peso a todos. Si el atleta no ha pasado alguna prueba, no podrá pelear. No hay ajustes monetarios, multas ni excepciones.

El desarrollo de este protocolo fue tomado en palabras de Matt Hume —vicepresidente de operaciones de ONE Championship— de las regularizaciones sobre hidratación que tiene la NCAA para la lucha colegial. Desde el desarrollo de estas normas pre competencia que la NCAA estableció hace 17 años, ningún atleta ha muerto como resultado de un corte de peso inseguro. Otro beneficio crucial para el atleta reside en tener la posibilidad de una carrera deportiva mas larga y saludable.

Los nuevos reglamentos de ONE FC significan una gran limitante a la hora de reducir el peso corporal para subir a la báscula. Es una movida arriesgada pero humanizada en pro de los atletas. Quitar la atención en la ceremonia de pesaje que los fans amamos, puede restar un "algo" al espectáculo pero quita presiones innecesarias a los atletas.

El nuevo protocolo de ONE Championship es un paso positivo en el MMA para evolucionar el deporte a un encuentro en condiciones justas y sobretodo, seguras. Son las mejores condolencias y muestras de respeto que se pueden prestar a la familia del atleta fallecido.

Los directivos de Tribe of Warriors confían en el evento presenciaremos peleas más emocionantes y mejores desempeños de atletas saludables y en su mejor forma.

Esperemos que otras empresas comiencen a considerar esta normativa sin miedo a que afecte el espectáculo. Finalmente, son los atletas los que llenan sus estadios.