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Por qué las ruedas de prensa de Luis Enrique no sirven para nada

Luis Enrique y los periodistas no se llevan nada bien, y eso se nota en las ruedas de prensa: casi sería mejor (y más productivo) que se fueran todos de fiesta. Lucho no vendría siendo el entrenador más simpático del mundo.
Luis Enrique con su cara de "¿otra vez me toca hablar sin decir nada?".

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Para un periodista deportivo, es lo mismo ir a la rueda de prensa del entrenador del FC Barcelona, Luis Enrique Martínez, que quedarse en casa echando un partido al FIFA. Bueno, no: al menos en casa te lo sueles pasar bien.

Imaginaos la situación. 'Lucho' entra a la sala de prensa con cara de hastío. Los periodistas llevan allí más de una hora esperándolo; nunca se sabe a qué hora exacta va a aparecer el entrenador. Todo el mundo conoce su… er, 'magnífica' relación con la prensa, que viene ya desde su etapa como jugador en el Real Madrid a principios de los años 90.

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Empieza la rueda de prensa y el jefe de comunicación explica que solo se permite una pregunta por medio de comunicación. Los periodistas empiezan a interpelar al técnico mientras se oye de fondo el sonido de las 4.537 fotos que le hacen a Luis Enrique cada medio segundo. Todas idénticas.

Las preguntas suelen estar totalmente vacías de contenido. "¿Qué tal el equipo?" "Bien". "¿Cómo está X jugador?" "Bien". "¿Qué te parece la violación masiva de bebés en la cara oculta de la Luna?" "Bien". Cabe decir en descargo de los periodistas que la poca imaginación de las preguntas no siempre es culpa suya: la experiencia con el asturiano les ha enseñado que si le intentan joder él no responderá… y puede que vete al periodista como hizo Dani Alves con Marca y As.

En una rueda de prensa tipo, a 'Lucho' le formulan unas 20 preguntas; él las responde en poco más de cinco minutos. La media de tiempo por pregunta+respuesta es de unos 20 segundos.

Sin embargo, tampoco es tan difícil de entender. Frente a preguntas como: "¿Vas a presentar un once inicial atractivo para el aficionado?", la respuesta de Luis Enrique es: "Los aficionados pueden estar tranquilos, van a ser 11 los titulares". Perfecto, excelente. Gracias a la profunda cuestión del periodista y a la cerebral respuesta de 'Lucho', ahora estamos mucho más tranquilos.

Por otra parte, hay preguntas que nacen muertas: están predestinadas a caer en el olvido. Este es un buen ejemplo: "Ayer hiciste una comida con la plantilla, me gustaría saber cómo fue, por qué se hizo, no sé…" (Este "no sé" es glorioso: "hola, señor presidente de los EEUU, me gustaría saber… no sé, algo"). La respuesta de Luis Enrique estuvo al nivel de la pregunta: "Fue una comida típica organizada por los capitanes y nos lo pasamos muy bien".

Uau, genial, ahora entendemos las razones últimas de la existencia humana y del origen del Universo.

¿Creéis que exageramos? Ved vosotros la rueda de prensa previa al partido de Copa del Rey frente al Villanovense y nos contáis. Avisamos que no serán los 13 minutos mejor invertidos de vuestra vida, pero bueno, es un país libre y cada uno ocupa su tiempo como quiere… ¿no?

Así son las ruedas de prensa en el Barça: un loco festival de humor e información donde todos podréis ser infinitamente felices. Mejor tomárselo con humor.