La meta del Tri: derrotar a EUA en su territorio
Troy Taormina-USA TODAY Sports

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La meta del Tri: derrotar a EUA en su territorio

Ohio le pertenece, completamente, a los estadounidenses. Es justo ahí donde se ha sembrado el poderío de "los de casa". Desde 1900 el estado ha sido vital para la elección de un presidente; solo en dos ocasiones no ha existido una coincidencia con el resultado final. Es también en ese lugar en donde la Selección Mexicana ha caído en cuatro ocasiones frente al combinado de las barras y las estrellas.

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En 2001 comenzó la rivalidad. El Mapfre Stadium se convirtió en un coloso de 20 mil personas, totalmente invencible. El 2-0 en la pizarra cobró fuerza. Desde la fecha antes mencionada, todos los duelos disputados en aquel inmueble han tenido ese resultado. Una verdadera pesadilla para "El Tri" que ha sido confeccionada por diversos factores: mayoría de norteamericanos en la tribuna, aparición de jugadores rivales claves y, sobre todo, un clima poco común para un futbolista, pues llega a marcar entre 0 y 3 grados centígrados.

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Esa ha sido la mejor jugada del representativo de la US Soccer, y no es para menos. Encontraron el punto débil del cuadro azteca, mismo que no ha podido ser combatido desde hace 15 años y que, se espera desde la Federación Mexicana de Futbol, que sea en este 2016 cuando se logre reivindicar el camino.

"México tiene a uno de sus mejores equipos en la historia", "Estados Unidos viene con un cuadro menos competitivo que en otras ocasiones". Hemos escuchado esas frases una y otra vez. Hemos permitido que la contextualización del primer juego del Hexagonal rumbo a Rusia 2018 se base en tan sólo esos dos conceptos, sin darnos cuenta que todo va mucho más allá.

Aunque la Selección sí tiene mejores hombres, uno por uno. ¿Por qué? Porque juegan en mejores equipos que sus rivales, con mayor regularidad; sin embargo, el cuadro de las barras y las estrellas nos ha demostrado que si algo ha sabido hacer bien, es jugar en conjunto, situación que le ha fallado al Tri.

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Si bien es cierto que esta vez Jurgen Klinsmann no pudo convocar a Clint Dempsey —uno de sus jugadores claves— debido a una arritmia cardiaca, es verdad que Michael Bradley y Tim Howard son suficientes, pues han demostrado que más que experiencia a nivel de cancha, tienen algo que pocos poseen: liderazgo.

Además, no podemos dejar de lado que, durante la pasada Copa América Centenario 2016, el cuarto lugar lo obtuvo el combinado estadounidense, mismo que se ubicó como el mejor posicionado de Concacaf, mientras México se quedó lamentando su pase a la semifinal, luego de la derrota de 7-0 frente a Chile.

Aunque tampoco se puede ser injusto con el Tri, pues tiene hombres de suma peligrosidad, como Jesús "Tecatito" Corona, Carlos Vela, Giovani dos Santos y Javier Hernández. Son estos cuatro jugadores quienes tendrán sobre sus hombros, la responsabilidad de contragolpear, hacer magia en la cancha y, sobre todo, marcar goles.

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Quizá sólo dos Santos y Corona llegan en su mejor momento, pues Vela y Hernández no han tenido sus mejores temporadas; sin embargo, ambos tienen alicientes: Carlos Alberto podrá reivindicar su cuenta con el combinado nacional, misma que se ha visto empañada por constantes rechazos a convocatorias, mientras que Javier puede llegar a igualar o, incluso, superar en anotaciones (llegar a 46) a Jared Borgetti y, convertirse así, en el máximo goleador de la Selección Mexicana (con 47).

Las estadísticas favorecen a Estados Unidos, es claro. Ohio es una tierra completamente dominada por los suyos; todo se presta para que la victoria se quede de nueva cuenta en suelo norteamericano: los antecedentes, los tres grados centígrados que marcará el termómetro esta noche. Pero ante esto podría aparecer de nuevo el que no pierde su mote pese a cualquier circunstancia: el gigante de CONCACAF, el mismo que, esta vez, sólo tiene una meta trazada: aprovechar la superioridad futbolística, hombre por hombre, para dejar atrás la "maldición de Columbus".