Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:A nadie le hace ninguna gracia perder la categoría, pero es evidente que unos se lo toman con más filosofía que otros. El caso de los fans del FC Zúrich suizo es extremo: tras consumarse el descenso de su equipo, los aficionados decidieron liar un buen follón e incluso intentaron entrar en los vestuarios.El Zúrich, 12 veces campeón de su liga —la última, en 2012— ganó el partido que disputaba frente al FC Vaduz, pero no dependían de sí mismos para evitar el descenso: la victoria del FC Lugano les mandó al infierno de la segunda división.A los ultras del equipo no les gustó ni un ápice.Aunque los aficionados llegaron incluso hasta la zona mixta, al final el personal de seguridad del estadio consiguió detenerles. El canal suizo Blick subió imágenes de la agresiva confrontación entre los fans cabreados y los guardias del campo. Afortunadamente, nadie salió herido.Tras el estallido en el estadio, los disturbios se trasladaron al centro de Zúrich, donde unos 500 aficionados se dedicaron al pillaje. La Policía se vio obligada a usar cañones de agua, gas lacrimógeno e incluso balas de goma para sofocar la violencia.El Zúrich empezó la temporada bajo la guía del exdefensa del Liverpool Sami Hyypiä, pero a principios de este mes el finlandés fue despedido con el equipo en la última posición de la tabla. El club suizo jugará en segunda división por primera vez desde 1990.
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