Anthony Joshua listo para Klitschko en 2017… si acaba primero con Eric Molina

En ocasiones, el boxeo promete muchas cosas pero, habitualmente, nos da muy poco. La desgastante saga entre Saúl "Canelo" Álvarez y Gennady "GGG" Golovkin presenta todas las señales de la frustrante novela entre Floyd Mayweather Jr. y Manny Pacquiao, pelea que dejó al boxeo en un estado similar al purgatorio porque la pólvora se mojó al momento de reventar.

El miedo de que una situación similar se materializara entre Anthony Joshua y Wladimir Klitschko —a discusión, la pelea más atractiva de peso completo en todos los deportes de combate— se propagó cuando la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) fracasó en su decisión para incluir su campeonato entre las recompensas de la pelea. Este fue el principal impedimento en las negociaciones, ya que Klitschko se negó a firmar la pelea a menos de que el cinturón estuviese en juego —campeonato que había quedado vacante por Tyson Fury después de sus problemas mentales y con las drogas—.

Como resultado, se anunció que Joshua enfrentaría a Eric Molina, boxeador mexico-estadounidense poco interesante oriundo de Raymondville, Texas. No hay duda que Molina es el oponente más duro de roer para Joshua hasta la fecha, pero su próximo espectáculo decembrino en Manchester, Inglaterra, dejó a muchos fanáticos decepcionados al enterarse de que Klitschko se había quedado en sólo una posibilidad.

Sin embargo, la AMB hizo un anuncio de último minuto la noche del martes en el que añade un toque especial al siguiente enfrentamiento de Joshua. La AMB confirmó que su faja estará en disputa en la pelea potencial entre Joshua y Klitschko el siguiente año —esto le garantiza un "acuerdo" por adelantado al boxeador británico—.

En declaraciones para Sky Sports, el promotor de Joshua, Eddie Hearn, dijo: "Fue hermoso ver finalmente que la decisión final de la AMB permitirá que Joshua y Klitschko se enfrenten el próximo año. El acuerdo está sobre la mesa, y ahora podemos organizarnos con Bernd y su equipo para sentar las fechas y recintos.

"El único impedimento de AJ es Eric Molina. Por eso tiene que estar enfocado para su pelea más difícil este 10 de diciembre en Manchester", añadió Hearn. "Wladimir estará en ringside con los dedos cruzados para que AJ gane y se pueda organizar la mega pelea para marzo/abril de 2017".

Bernd Boente, miembro del equipo de Klitschko, opinó casi lo mismo para ESPN: "El equipo de Klitschko está muy contento por la resolución de la AMB. Wladimir siempre fue el orgulloso y comprometido súper campeón de la AMB, y ahora quiere reconquistar su corona. Desde el principio, Wladimir dejo claro qué tan importante es para él que el título de la AMB esté en disputa en su siguiente pelea.

"Esperamos que Anthony Joshua gane su próximo enfrentamiento con Molina para poder realizar el mega evento, el sueño de todo promotor hecho realidad para marzo o abril. Dos ganadores de oro olímpico enfrentándose, el joven león desafiando al viejo león. Es una pelea que todo fan del boxeo en el mundo quiere ver".

Cerrar peleas de esta magnitud con tanta anticipación es un negocio inherentemente arriesgado. Como mencioné antes, Molina es sin duda la prueba más difícil en la carrera de Joshua —sin importar sus limitaciones arriba del ring—, síntoma de una débil división de peso completo y una deslucida competencia a la que Joshua se ha enfrentado. Molina es bien estimado en la división de los pesos pesados, gracias al nocaut que le propinó al ex campeón semipesado y campeón crucero, Tomasz Ademek, en el décimo asalto y ante su gente de Cracovia, Polonia, para hacerse del campeonato de peso completo Intercontinental de la FIB.

Molina también enfrentó al actual campeón del mundo (CMB) de los pesos completos, Deontay Wilder, por su cinturón en 2015, y llegó a meter en muchos problemas a Wilder en el tercer asalto, luego de "tocarlo" con una gran derecha. Sin embargo, Molina perdió por nocaut en el noveno asalto, sumando su tercera derrota profesional por esta vía. Molina es duro de roer, irreverente, y pocas veces aburre. Su voluntad para aguantar castigo con tal de que él también pueda repartir golpes ha sido su ruina en el pasado, y seguramente Joshua buscará explotar ese aspecto con su poder de golpeo.

A pesar de su decepcionante primer intento para convertirse en campeón mundial, Molina luce confiado previo a su viaje a Inglaterra, presumiendo su éxito reciente en Polonia, y quiere arruinarle la fiesta a Joshua, Klitschko, y al resto del mundo boxístico, que espera ansiosamente una victoria de Joshua para asegurar el choque de titanes del próximo año.

"Puedo asegurar algo sin miedo a equivocarme, golpearé a AJ tan fuerte como nunca le han pegado", Molina declaró para Sky Sports. "Así será el 10 de diciembre. Le pegaré muy fuerte y si se pone a bailar, y lo puedo lastimar, no me reservaré como lo hice con Wilder.

"Mi sueño es pelear en el Reino Unido. Estoy ansioso por pelear y llevarme una victoria inesperada. Será una de las peleas más difíciles de su carrera porque como peleador he mejorado mucho. Enfrentará al Molina más rudo que jamás se haya visto antes, así como Adamek se vio las caras con el Molina más difícil".

Es cierto que Molina podría dar una excelente pelea, pero el mundo del boxeo espera que sus palabras no muerdan el 10 de diciembre por el bien de uno de los combates más grandes en la división de los pesos completos de este siglo.