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Jorge "Chato" Vázquez, el bombardero sin Bronx

El domingo pasado, todo el mundo esperaba el Super Bowl. A mí me causaba más interés el desenlace de los Venados de Mazatlán en la Serie del Caribe
Fotografía por Santiago Vidal/Getty Images

Cuatro días de cruda. Así es, dejé de ser aquél preparatoriano que se empedaba en miércoles y el jueves despertaba tan fresco como césped recién regado. Un puto lugar común que seguro cualquier tío, amigo o hasta tu papá lo dice en una peda: ya me dan crudas de 2 días. ¡Mi resaca duró 4 días! Esta vez no fue de alcohol, fue del tremendo batazo de Jorge "Chato" Vázquez.

El domingo pasado, todo el mundo estaba volcado en espera de las bodas de oro del Super Bowl. Me caga el mame de la banda, pero cada quién. A mí me causaba más interés el desenlace de los Venados de Mazatlán en la Serie del Caribe.

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No puedo dejar de pensar en el sonido de la madera al contacto con la pelota. Es tan adictivo como el sonido que provocan los hielos al golpear el vidrio de un vaso. Hablando de crudas hay un síntoma en particular que me causa muchos problemas: el asco. Asco de oler o pensar en el mezclador con el que bebiste, o el olor del brebaje con el que te emborrachaste. Yo no tuve asco del cuadrangular del "Chato" y mucho menos del sonido que causó ese macanazo histórico. Tuve asco del tan asqueroso medio tiempo del Super Bowl.

Fotografía por Ezra Shaw/ Getty Images

No es casualidad que el cuadrangular con el que México obtuviera su noveno título haya sido del "culichi". En 2011 fue nombrado el jugador más valioso de la Serie del Caribe. El "Chato" ayudó a los Yaquis de Ciudad Obregón a ganar el clásico del Caribe por primera vez y por sexta vez para México, con un cuadrangular que provocó 2 carreras ante el representativo venezolano: Caribes de Anzoátegui.

La historia de Jorge Vázquez podría ser comentada por todos nosotros como ha sido comentada la carrera de Carlos Vela (más por polémica que por buenos resultados). Pero no, no interesa un carajo porque no es futbol. Y el "Chato" ha tenido mejores resultados, así que vale verga Vela.

El primera base probó suerte en 2008 con los Yankees. En ligas menores conectó 32 batazos de vuelta completa e impulsó 93 carreras, nada mal. Pero fue borrado y regresó a jugar para los Tigres de Quintana Roo de La liga Mexicana de Béisbol (LMB). Un bombardero que rechazaron "Los bombarderos del Bronx".

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Así es como sigue sin entender las decisiones directivas de algunos equipos. Es su pedo. Todos lamentan el fugaz paso del "Chicharito" con el Real Madrid, yo lamento el rechazo de los Yankees hacia el "Chato". Cuento esta historia porque es un síntoma de la cruda, la nostalgia o esa sensación de que hiciste algo mal aunque todo esté bien.

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Y hablando precisamente de la resaca, en algunos foros de béisbol de Culiacán hablan mal de Jorge Vázquez: "borracho", "no siente los colores", "desobligado". Pero todo esto tiene una explicación que intentaré dar:

En 2015, ya con los Tomateros; se anunció que el primera base se había lastimado la muñeca derecha en los vestidores "bajo circunstancias desconocidas". Penosamente el mame se da en todos los deportes. Ojalá sólo fuera en el futbol. Putos. Esa lesión se dio en medio de los Playoffs de la Liga Mexicana del Pacífico. Más tarde Vázquez explicó el motivo de la lesión.

El motivo que lo privaba de las finales en la liga del Pacífico, era que había sufrido un intento de asalto y él había reaccionado de forma violenta, tirando un derechazo que lo hizo luxarse la muñeca. Aquí es dónde vienen todos esos pedos que nos encanta echar a los aficionados: "Seguramente fue por andar de pinche borracho". Expertos del mame.

Por ese mismo incidente Jorge no jugó la pasada Serie del Caribe (2015) con los Tomateros. Torneo en el que los de Culiacán llegaron a la final pero la perdieron con los Vegueros de Pinar del Río, equipo que representaba a Cuba.

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Este año, luego de que los Tomateros quedaran fuera de los playoffs de la Liga del Pacífico. El "Chato" expresó sus deseos por reforzar a otros equipos interesados en sus servicios, que había accedido a los playoffs. Nada nuevo, directivos frenando jugadores.

¡En mi vida me vuelvo a poner un uniforme de los Tomateros, son muy malos perdedores!

Una historia de amor odio entre el pelotero y los de Culiacán. Después del berrinche, en enero del año en curso, Jorge fue firmado por los Tigres de Aragua, equipo venezolano. Días después de su llegada a Venezuela tuvo que regresar de emergencia por la muerte de su padre. Lo que impidió poder jugar las finales con los Tigres que más tarde conseguirían avanzar a la Serie del Caribe.

Y en el Clásico del Caribe ya sabemos lo que pasó. Tablazo de vuelta entera de Jorge "Chato" Vázquez, para conseguir la novena Serie del Caribe para México. Ante su viejo equipo: Los Tigres de Aragua. Para que la cuña apriete tiene que ser del mismo palo.

Así, con la historia del pelotero mexicano trato de curarme esta cruda deportiva que me ha dejado el fin de semana. Cuatro días de cruda. Y no, para nada me quedo con el triunfo de los Potros de Denver y su defensa. Me quedo con el tremendo putazo que Vázquez le dio a la pelota para conseguir un jonrón. Ese putazo sigue retumbando en mi cerebro. Igual que el dolor de cabeza que causa la cruda después de haber empedado con anís.