De niño problemático a medallista olímpico: Así fue el ascenso de Anthony Joshua
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De niño problemático a medallista olímpico: Así fue el ascenso de Anthony Joshua

Anthony Joshua tuvo que superar varias pruebas para llegar a la cima del boxeo profesional, desde cargos en su contra por posesión de drogas hasta un breve paso por la cárcel.

La tarde del 20 de enero de 2011, la policía detuvo un Mercedes por exceso de velocidad en el sombrío suburbio de Colindale al norte de Londres. Dentro del auto se encontraba Anthony Joshua y, como después la inspección revelaría, se encontraron ocho onzas de marihuana dentro de una mochila deportiva. Joshua fue arrestado y acusado por posesión de una droga de tipo B, y meses después tuvo que aparecer en corte. Aunque el delito está acompañado de una sentencia máxima de 14 años en prisión, a Joshua le fue otorgada una orden de 12 meses de trabajo comunitario 100 horas de trabajo sin derecho a salario. En el contexto de su carrera boxística, y vida en general, debió ser una completo alivio.

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El servicio comunitario no fue la única consecuencia para el joven Joshua de 21 años, quien en ese entonces era el campeón amateur británico y una de las esperanzas nacionales para llevarse una medalla en Londres 2012. Fue vetado de toda competición boxística internacional y nacional, y había una gran posibilidad de quedarse fuera de los Olímpicos. La mala publicidad generada por su capítulo con las drogas, al igual que su tiempo en la prisión de Reading por lo que Joshua describiría, tiempo después, a The Guardian como "una pelea y otras cosas", dejaba a los miembros del equipo de Gran Bretaña con un atleta problemático en sus manos. A pesar de ello, decidieron perseverar con Joshua y terminaron con un supercampeón de peso completo y una figura trascendental en los Olímpicos de Londres.

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Luego de haber aprendido sus bases en el renombrado Finchley Boxing Club, era oportuno que Joshua alcanzara la cima de su carrera amateur durante los Olímpicos organizados en Londres. En muchos sentidos, se trataba de una competición de casa, la cual le dio la oportunidad para mostrar su talento cerca del lugar donde se había criado. Joshua creció en un estado cerca de Watford, hijo de padres nigerianos y acudía a la escuela en Kings Langley en Hertfordshire. Era, en palabras suyas, un adolescente común y corriente de los barrios periféricos de Londres, pues se la pasaba bebiendo en las cantinas descuidadas de la zona y jugando partidos de futbol que en ocasiones llegaban a la violencia física.

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Cuando Joshua tuvo su siguiente enfrentamiento con la ley y terminó en prisión preventiva en Reading, esquivó una sentencia en la cárcel, pero se le ordenó que portara un dispositivo en su tobillo durante un año. Desde entonces, dice que esta experiencia le dio una idea de la disciplina del deporte en su vida, ya que tenía que apegarse al horario permitido para salir —máximo ocho de la noche— lo que lo privaba del caos como adolescente. También le ayudó a ocuparse en otras actividades, entre ellas dedicarse seriamente al boxeo.

Luego de acudir al gimnasio Finchley ABC para mantenerse en forma y levantar pesas a los 17 años, Joshua se calzó los guantes por primera vez y quedó maravillado. Cuando no podía salir por las noches por la orden del juez, su interés en el boxeo lo consumía. Se podría decir que su primer tropiezo con la policía —que pudo haberlo condenado a la cárcel— lo colocó en la cima del boxeo amateur. Lo mismo se puede decir de su arresto por posesión de drogas con intento de suministro lo que le otorgó el cruel recordatorio de que si se salía del camino una vez más, sabía perfectamente cuáles serían las consecuencias.

Sin embargo, con esta última indiscreción pública, Joshua comenzó su preparación para Londres 2012. Entrenó arduamente, impresionó a miembros del equipo de Gran Bretaña y periodistas por igual, y para octubre de 2011 el Club de Escritores de Boxeo de Gran Bretaña lo nombró Boxeador Amateur del Año. Siendo aún un novato en la escena internacional, participó en el Campeonato Mundial de Boxeo Amateur en Bakú, y se dio a conocer después de derrotar al campeón olímpico de ese entonces, Roberto Cammarelle, al igual que a Erik Pfeifer de Alemania, antes de perder ante el nacido en Azerbaiyán, Magomedrasul Majidov, por un punto en la final. Al menos pudo ganar la medalla de plata, y el reconocimiento y esperanzas en Gran Bretaña de que una vez inaugurados los Olímpicos del 2012, Joshua se alzaría con el oro olímpico.

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Cuando finalmente los Olímpicos arrancaron, Joshua recibió una de las pruebas más difíciles al enfrentar al cubano Erislandy Savón en los octavos de final. Savón estaba clasificado en el cuarto lugar del mundo por AIBA, aunque también había caído previamente ante el poderío de Majidov en el Campeonato Mundial un año antes. Ya que las competencias en la categoría de los pesos completos estaban a cinco días de la ceremonia de apertura de arrancar, la Gran Bretaña se encontraba contagiada por la fiebre de medallas y emocionados por un evento que no era bienvenido por su costo. Rodeado de esa atmósfera de emoción, Joshua subió al ring para mantener viva la esperanza de medalla.

Aunque quizá se haya olvidado por la erupción de emociones que se dio después, Joshua batalló en la primera pelea ante Savón. A pesar de intercambiar golpes con el cubano durante tres episodios y ganar por un margen de un punto, algunos espectadores sintieron que Savón había hecho lo suficiente para llevarse la victoria; el Daily Mail describió a un Joshua "superado en clase y boxeo". Pero Joshua no permitió que la controversia en torno al resultado lo afectara, y posteriormente se llevaría una contundente victoria sobre el chino Zhang Zhilei en cuartos de final, luego de mandarlo a la lona en el segundo asalto y llevarse la puntuación de 15-11. Después, en una pelea apretada, derrotó a Ivan Dychko de Kazajstán en la semifinal por marcador de 13-11.

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Joshua enfrentando a Cammarelle // PA Images

Esto le aseguraba la medalla de plata a Joshua, lo cual igualaría sus logros conseguidos en el Campeonato Mundial. Aún así, estaba determinado a mejorar cuando se viera las caras con el antiguo enemigo, Cammarelle, en la final. La pelea tuvo lugar el 12 de agosto, el día final de los espectaculares Olímpicos que, a juzgar por el medallero, había sido un éxito más allá de las expectativas de los británicos. Joshua se encontraba a tres rounds de sumar una mellada de oro más a la delegación de casa.

Motivado por la grada local, Joshua se puso al tú por tú con el boxeador italiano. El primer episodio fue algo sucio en el arranque, pero después ambos lograron conectar golpes limpios, en especial Joshua quien fue acorralado en una de las esquinas. El británico perdió el primer round 6-5, y el segundo no mejoró, ya que los jueces calificaron el episodio 13-10 a favor de Cammarelle. Sin embargo, Joshua peleó con ferocidad en el tercero, conectando golpe tras golpe sobre su blanco exhausto para emparejar el marcador 18-18.

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Aunque Joshua levantó su mano como señal de triunfo en el campanazo final y Cammarelle lucía cansado, el triunfo del campeón británico vía countback fue cuestionado después de la pelea. Había algunos que aseguraban se había tratado de una clásica decisión localista; algunos otros apoyaban a Joshua completamente. Pero a Joshua no le importaba, pues sonreía con la medalla de oro colgando de su cuello. Su victoria olímpica había sido todo menos fácil, y dos de sus contiendas habían sido muy justas. De todas formas, a él no le correspondía preocuparse por sus detractores y los pormenores del sistema de puntaje. Era medallista olímpico de oro, y había construido la plataforma perfecta desde la cual catapultar su carrera.

Si el camino de Joshua hacia la cima estuvo plagado por la dificultad, dentro y fuera del ring, es porque sus experiencias tenían el propósito de hacerlo un mejor boxeador. Desde Londres 2012, ha ganado los títulos de peso completo del CMB (Internacional), Commonwealth y Británico, y actualmente posee la faja mundial de la FIB con un récord invicto. Ahora, como en el pasado, carga con el peso de las expectativas sobre sus hombros, y en ocasiones se le describe como el hombre que puede provocar el renacimiento de los pesos completos en Gran Bretaña. Ya sea que pueda o no ganarse un lugar con las leyendas del boxeo, Joshua está ahora bastante lejos de un insignificante crimen y una breve estancia detrás de los barrotes.

@W_F_Magee