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hielo caliente

El 'Cachorro' del año ya cumplió 22 primaveras

Han pasado 22 años desde el lanzamiento del 'Novato' del año'. Todavía no hemos logrado ver a un jugador de 12 años, pero ojalá algún día se logre.

Los Cachorros de Chicago parecen un equipo destinado para esta temporada. Después de todo estamos en el 2105, y como todos sabemos toda predicción hecha en Volver Al Futuro II tienen que ser cosificadas para evitar que los hijos de Marty McFly se disuelvan en la nada —un "Café 80's" en cada cuadra y pizza deshidratada en cada horno, o finalmente perderemos al doble de Crispin Glover para siempre. Dicho esto, el contenido deportivo en Volver Al Futuro es mínimo, incluso si metes una sub trama a la Sports Almanac de Gray y el holograma 3D CACHORROS VENCEN A FLORIDA. Si eres un fan de los Cachorros en busca de deleitarte en una fantasía cinemática, tendrás que regresar a 1993. Hazlo, prepárate para ver mucho de Gary Busey, y relájate, ya que un niño te guiará a la gloria ficticia.

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Para ser una cinta que salió hace un poco más de 22, El Novato del Año, sorprendentemente se mantiene. Es casi tan buena como Nuestra Pandilla, en cuanto a las comedias de béisbol de los 90 se refiere; es mucho mejor que Little Big League, la contraparte razonable que sustituyó los fundamentos del béisbol y a Timothy Busfield por la fantasía de El Novato del Año y Gary Busey. Hablando en serio, ¿alguna vez has visto Little Big League? Es como una película para niños escrita por George Will. El Novato del Año es como una película para niños escrita por niños más divertidos de lo regular. Es un cumplido.

Thomas Ian Nicholas es Henry Rowengartner, un millenial lanzando en las mayores antes de que siquiera la Generación K tuviera una oportunidad para acabarse. Rowengartner viste el número 1 de los Cachorros, como muchos únicos y futuros Phillies antes que él. Pero a diferencia de las leyendas de los Cachorros como Richie Ashburn, Doug Glanville, y Larry Bowa, Henry pasa su carrera de mes y medio en Chicago liderándolos hacia el banderín y las ganancias. Si Rowengartner quisiera, aún podría lanzar en las mayores; con 35 años apenas sería dos años mayor que el actual semi-cerrador de los Cachorros, Jason Motte. Nicholas es muy bueno en su papel por el título, sabiendo cuándo actuar como un niño y cuándo actuar como un niño en una película donde él lidera a los malditos Cachorros de Chicago al título de la división.

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Al principio de El Novato del Año, Rowengartner es solo un niño con el nivel de un reemplazo. Como adolescente todavía le falta conocer el amor, pero como jugador de pequeñas ligas sabía todo sobre un WAR (Victorias por encima del reemplazo) negativo. Con un guante en mano, Henry no atrapaba ni un resfriado en Wrigley Field en abril pasado. Pero sí pudo tropezarse con una pelota de béisbol, lo que le provocó que se rompiera un brazo, y que después se sometiera a una cirugía de Tommy John accidental que se convirtió en el origen de su historia.

Si hay algo que la gente recuerda de El Novato del Año es cuando Henry le pega a un doctor en la cara, accidentalmente, con su brazo recién rehabilitado, obligando al pobre Dr. James Andrews a exclamar "AY CANIJO". El efecto de sonido del brazo de Yung Rowengartner estirándose como una resortera, ya ni mencionar a los amigos de Henry metiéndose utensilios médicos en las orejas y en la nariz en el fondo, es lo que hace de esta escena un clásico del género.

Tras atacar físicamente a un médico profesional, Henry es recompensado con boletos para ver a los Cachorros. Rowengartner atrapa un cuadrangular en las gradas conectado por un tipo desconocido. Rowengartner avienta la pelota de regreso al campo, una de las peores imágenes generadas por computadora de toda la historia, a más de 400 pies de distancia hasta el plato de salida. Después de evitar a unos cuantos fanáticos desadaptados, a Henry le ofrecen un contrato con los Cachorros. De repente está en las mayores; Dan Hedaya, el manager general del equipo, evidentemente jamás había escuchado la historia de David Clyde.

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Tiene sentido que Rowengartner sea el cerrador del equipo, no solo en términos de la trama, sino también en cuanto a la salud psicológica de un niño de 12 años. Dan Hedaya siempre obtiene lo que quiere —lo cual siempre es bueno porque parece que siempre recibe malas noticias sobre su salud— y salva a los Cachorros de la bancarrota, Gary Busey encuentra su media naranja, y casi todos los trabajadores de la escena del teatro de Chicago reciben su pago. Todos ganan.

Te sientes mal por Henry porque es explotado por los directivos de los Cachorros y por el que sería su padrastro. Su amigo George lo trata mal porque confunde los efectos exhaustivos del trabajo infantil por desaires de parte de Henry. En algún punto, Henry es vendido a los New York Yankees, el cual probablemente es el giro menos realista de toda la cinta; ni George Steinbrenner era tan malo. La relación entre Henry y su madre (Amy Morton, muy buena para esto), y el viejo as del equipo Chet Stedman (Gary Busey, demasiado Gary Busey para esto) se fortalece. Incluso se gana el respeto de sus amigos y del amargado primera base del equipo, protagonizado por el aclamado comediante intendente de "Scrubs".

El hecho de que en la actualidad disfrutara ver El Novato del Año más que hace 22 años dice algo sobre el tipo de niño que era. Ciertamente tampoco ayudó que Henry Rowengartner fuera presentado como un "niño normal", y que en 1993 salieran varias películas donde "niños normales" atravesaban experiencias traumáticas, películas como My Girl, Man Without A Face, y Radio Flyer que mi madre creía apropiadas para mí y para mi hermana. En el fondo de mi subconsciente estaba preparado para ver a Henry ser golpeado por un desfigurado monstruo abeja.

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En su lugar, todo lo que pasa en

El Novato del Año

es felizmente absurdo. Seguro, Joe Nuxhall hizo su debut en la MLB a la Rowengartneriana edad de 15 años, pero solo porque era la mitad de la maldita Segunda Guerra Mundial y nadie más estaba disponible durante la paliza. La suspensión de la incredulidad es lo que se necesita, y no solo porque (¿spoiler alert?) los Cachorros ganan la Serie Mundial.

El Novato del Año

es un refrito nominal de

Roogie's Bump

, una cinta oscura de 1950 en donde otro niño salva a los Brooklyn Dodgers de sí mismos. Parece seguro asumir que la primera es mucho más superior, si no fuera porque juega astutamente con el amor universal de las audiencias por los insultos del tipo "LOS PITCHERS TIENE GRANDES TRASEROS".

De esas veces cuando tienes una mágica cirugía de Tommy John pero tu voz no ha cambiado.

Daniel Stern es más exitoso por dirigir El Novato del Año que por presentar al entrenador de lanzamiento Phil Brickma. No ayuda que Brickma sea excéntrico por unas cuantas bolas malintencionadas. Pero si quitas eso y la ETC, hasta Brickma tiene buenos momentos, especialmente la infame escena del "hielo caliente", en donde sugiere hervir hielo como sustituto de IcyHot. Finalmente le entendí a ese chiste después de 22 años, y valió pena la espera.

Stern es bueno para la comedia física, y su influencia se nota en los momentos más dispersos de la cinta. También se beneficia de un buen reparto, de los cuales muchos fueron compañeros de Stern en la escena del teatro de Chicago. Por ejemplo, Ian Gomez es muy gracioso en su escena como mozo de elevador, y Bruce Altman provee una buena imagen del novio cretino. También tenemos a W. Earl Brown y al antes mencionado Neil Flynn en los Cachorros de 1992, que son más talentosos que los actuales.

Es difícil ver al gran Eddie Bracken actuar como el caprichoso dueño senil de los Cachorros, pero hace su trabajo y lo hace bien. Albert Hall, mejor conocido como el jefe Phillips en el clásico Apocalypse Now, es bueno como manager que desarrolla un respeto duradero por su cercano Gardenhoser, o Rosinbagger, o quien sea. El legendario John Candy es un pobre sustituto de Harry Caray como el anunciador de los Cachorros, algo que tiene en común con todos los demás en este mundo.

Los jugadores que no son Steppenwolf en El Novato del Año también son divertidos de ver. Observar como Barry Bonds, Bobby Bonilla y Padre Guerrero son ponchados en 1992 es más divertido que cualquier cosa que les haya pasado. El ex pelotero Tim Stoddard siempre será Tregoraw, el Dodger de trasero prominente que le tocó lanzar para Rowengartner.

El Novato del Año está lejos de la perfección —ninguna película donde un mocoso blanco tararee "You Got The Right One, Baby" puede ser perfecta— pero la disfruté tanto, si no es que más que cuando era niño. Si tienes un hijo, un sobrino o sobrina que necesite que los cuiden por un par de horas, El Novato del Año puede ser una buena opción, incluso cuando pueda tomarles —hasta a los más listos y guapos— más de dos décadas entenderle a algunos chistes. Hasta podría valer la pena volverla a ver en invierno, en caso de que Volver Al Futuro le haya atinado a sus predicciones para 2015.