Recordando a Shawn Kemp, Gary Payton y esa vez que los Supersonics llegaron a México

En los años 90 hubo una camada importante de basquetbolistas que inyectaban personalidad y color a la NBA. Muchos recuerdan a los Bulls de Chicago con su dominio de la década, pero había una larga lista de jugadores como Charles Barkley, Hakeem Olajuwon, Patrick Ewing, David Robinson, Karl Malone o Clyde Drexler, mientras las nuevas generaciones llegaban con figuras como Shaquille O'Neal. Entre todos estos, había un dúo que se integraba a todo la iconografía noventera de Seattle y a la vez impactaba la NBA con una energía explosiva: Shawn Kemp y Gary Payton.

Para los fanáticos mexicanos, es impresionante recordar a estos nombres y pensar que la mayoría de ellos pasaron por el Palacio de los Deportes, exhibiendo el mejor basquetbol de la década en el país. En 1994, se organizaba el NBA Challenge en la Ciudad de México donde cuatro equipos se enfrentaban en un torneo de pretemporada. Y para el gozo del público mexicano, llegaban Hakeem Olajuwon con los Rockets, David Robinson con los Spurs, y justamente el emblemático dúo de los Supersonics de Seattle, Shawn Kemp y Gary Payton.

Como si tuvieran una sincronización automatizada, la imagen de Payton lanzando el balón al aire y Kemp arrebatándolo en mero vuelo para clavarla llenaban los videos de jugadas destacadas a lo largo de la década. Sin duda el alley-oop era la culminación espectacular del dúo conocido en algún momento como "Sonic Boom", pero eran mucho más que sólo un par de atléticos basquetbolistas buscando jugadas llamativas. Kemp era un imponente poste que volaba encima de todos para clavar el balón o taparlo en la defensa, pero también tenía un consistente tiro de media distancia y un creativo juego con la espalda contra la canasta. Payton era un figurón de la NBA, considerado entre los mejores de todos los tiempos y un maestro de la defensa que se convirtió en el único base o point guard en la historia de la NBA en ser galardonado con el premio de Jugador Defensivo del Año.

Justo fue en 1994 cuando los Supersonics pisaban el Palacio de los Deportes que el equipo empezó a conjugar su personalidad. Con Sam Perkins, Detlef Schrempf y Kendall Gill rodeando a Kemp y Payton en el cuadro titular, Seattle jugaba una defensa agresiva y sofocante que daba pauta para la velocidad y el atletismo de sus estrellas. Y cuando Kemp y Payton se topaban con la defensa, tenían a jugadores como Schrempf, Vincent Askew y Sam Perkins esperando el pase para marcar con tiros de larga distancia. Perkins era un rareza en la época, un centro que extendía la jugada hasta el tiro de tres puntos.

El 28 de octubre de 1994, los Supersonics arrancaron el segundo juego del NBA Challenge México contra los Cippers de Los Ángeles. Sam Perkins anotaba 20, Gary Payton 18 y el lituano Sarunas Marciulionis agregaba otros 18. Los Supersonics daban muestra de lo que vendría en las siguientes temporadas, un juego en equipo, una energía inagotable y un compromiso con el juego duro en los dos lados de la cancha. Supersonics 133, Clippers 105, y el público mexicano ovacionaba.

El siguiente día, los Supersonics enfrentaban a los Spurs de San Antonio, los evidentes consentidos del Palacio de los Deportes. Los mexicanos celebraban las locuras de Dennis Rodman y estaban ansiosos de ver las grandezas de David Robinson quien se apoyaba de Sean Elliot, Avery Johnson y Vinnie del Negro. El equipo de Spurs era sólido y su estatus en la NBA como potencia estaba establecida.

Los Supersonics, por el otro lado, no tenían el mismo reconocimiento que los Spurs en México y seguía siendo un cuadro lleno de juventud. Pero esa noche México supo bien de qué se trataban los Supersonics. Los Supersonics distribuían el balón, corrían por toda la cancha y sofocaban las respuestas de los Spurs. Con un margen de 29 puntos, Seattle vencía a San Antonio 124-95 y quedaban campeones del NBA Challenge de 1994 que marcaba el tercer año que la NBA llegaba a México.

Durante la temporada, Seattle se mantendría codeando con los grande de la NBA, llegando a la postemporada pero cayendo ante los Lakers en la primera ronda. Pero sería un año clave para que los Supersonics consolidaran su estilo y personalidad sobre la cancha. El siguiente año, Seattle tomó un paso mayor. Lucían completamente dominantes y terminaban con el mejor récord de la Conferencia Oeste (64-18). Kemp y Payton seguían siendo los rostros y los pilares pero lejos de ser las superestrellas egoistas en búsqueda de la jugada espectacular, defendían como nadie y aprovechaban su juego para elevar el equipo entero. Los Supersonics compartían el balón y explotaban en momentos clave. Arrasaban en la postemporada, sacando a Sacramente, Houston y Utah de sus caminos para enfrentarse al legendario equipo de los Bulls de 1996. Hicieron batalla pero fue complicado. Los Bulls ganaban las Finales, pero los Sonics marcaban su propia época.

Han sido 25 años que la NBA ha traído a figuras históricas a México, así como a Allen Iverson en el 2000 o John Stockton y Karl Malone en 1996 cuando llegaron a la final. El 12 de enero, los Suns recibieron los Mavericks para mantener la tradición mexicana de NBA, y el sábado 14 de enero recibirán a los Spurs en la Arena Ciudad de México donde estará Gary Payton como parte de la celebración. Aquí puedes conseguir tus boletos.