Lo que aconteció anoche en los octavos de final de la Champions League es uno de esos episodios que conjunta todos los elementos que hacen del futbol el deporte más hermoso del planeta: la tibieza del PSG para salir con el autobús atrás, la incompetencia de Unai Emery por no iniciar con Ángel Di María, el descaro localista del árbitro, y la magia de Neymar para lograr lo que se creía imposible. El Barcelona está en cuartos, y por más simplista que suene, es todo lo que importa.El sexto gol de Sergi Roberto a un minuto de la conclusión del tiempo agregado fue el premio del Barcelona por su insistencia para revertir la historia. La jugada será recordada hasta que no exista memoria en el futbol y, sobre todo, la manera en que el mundo festejo la grandiosa jugada.
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Como era de esperarse quienes más se emocionaron fueron los cronistas catalanes. Los ingleses, siempre fieles a su carácter, celebraron pero no como se merecía un gol de este tamañao. Por otra parte, los franceses no lo podían creer, "Ces't pas possible! Ces't pas possible!"Pues sí, sí fue posible. Ahora queda celebrar, pero eso sí, el Barcelona no ha ganado nada y aún queda mucho camino por recorrer.هدف الـ ريمونتادا التاريخية بـِ قدم سيرجي روبيرتو بصوت 12 مُعلق حول العالم — FCB World (@FCBW_A7)9 de marzo de 2017