El PND 2015: el karma de la natación mexicana

Entrada la noche, hace un par de días, desde la cuenta de Paola Espinosa, doble medallista olímpica mexicana, surgió una queja. Retuiteó tres publicaciones de su mánager, Claudia Ruiz, quien expresó su desacuerdo –que asumimos que comparte Paola– sobre las designaciones del Premio Nacional de Deportes 2015.

Mis respetos para ganadores pero el jurado dejó fuera a lo mejor del deporte mexicano, los deportes acuáticos #clavados #nadosincronizado
— Claudia Ruiz (@YuyisRuiz) November 4, 2015

Ni #clavados ni #nadosincronizado, ningún acuático actual fue reconocido por el Premio Nacional de Deportes y Mérito Deportivo 2015 #QuePoca
— Claudia Ruiz (@YuyisRuiz) November 4, 2015

No entiendo criterios del jurado para dejar fuera a clavadistas que fueron campeones panamericanos y medallistas mundiales del PND y Mérito
— Claudia Ruiz (@YuyisRuiz) November 4, 2015

Después Paola, a título personal, remató con los siguientes dos:

#Clavados siempre ha sacado la casta por el deporte mexicano una pena que no se haya valorado oros en JP, platas mundiales y trayectoria
— Paola Espinosa (@PaolaEspinosaOf) November 4, 2015

Pero a seguir entrenando y dando lo mejor por México, mis respetos para quienes ganaron solo que el jurado dejó fuera a #clavados
— Paola Espinosa (@PaolaEspinosaOf) November 4, 2015

Y se armó la gorda. Su condición de doble medallista olímpica y campeona mundial hizo eco en los medios. Pese al lío, hay una cosa que es cierta: en un año de pobres resultados para el deporte mexicano, los clavados entregaron dos medallas mundiales de plata: con Iván García y Germán Sánchez en los sincronizados desde la plataforma de 10 metros y la de Jonathan Paredes en los saltos de altura. Fueron los mejores resultados que obtuvieron deportistas mexicanos en competencias internacionales en 2015.

De hecho, Iván García retuiteó los cinco mensajes mencionados desde su cuenta.

El Premio en la categoría de deporte amateur, justamente en la que competían los clavadistas, se lo llevó Saúl Gutiérrez, bronce en el Mundial de taekwondo de Chelyabinsk, Rusia, en -63 kgs., y el triatleta Crisanto Grajales, cuarto lugar en el Mundial de su especialidad en Chicago.

No es hacerlos menos: Saúl fue el único taekwondoín en dar podio en un Mundial desastroso para México, mientras que Crisanto dio un resultado inédito en una disciplina donde el país nunca ha figurado, además de que ambos ganaron oro en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015. Pero no le llegan a "Pollo", "Duva" ni a Jonathan Paredes.

La Federación Mexicana de Natación inscribió a 17 de sus atletas para el PND: además de los tres clavadistas mencionados, en la misma disciplina aparecían Paola Espinosa, Rommel Pacheco, Dolores Hernández y Jahir Ocampo; en nado sincronizado, Nuria Diosdado, Karem Achach, Evelyn Guajardo, Joana Ramírez, Karla Arreola, Samantha Rodríguez, Teresa Alonso, Isabel Delgado, Jessica Sobrino y Sofía Ríos; además, su entrenadora Adriana Loftus y para el Premio Nacional de Mérito Deportivo se postuló a la nadadora Laura Vaca, con 40 años de trayectoria en las piscinas y actualmente con dos récords mundiales en su categoría.

Ninguno ganó. Todos los clavadistas contaban con al menos un oro panamericano en este año –excepto Jonathan Paredes, pues no compitió ahí–, las ondinas con un histórico bronce en la Copa del Mundo 2014 (que todavía entró como palmarés para esta edición), dos platas en Toronto 2015 y un inédito octavo lugar mundial.

¿La explicación? El karma.

La Federación Mexicana de Natación regula las cuatro disciplinas acuáticas: natación (en piscina y aguas abiertas), clavados, nado sincronizado y polo acuático. Los resultados que se dieron en los saltos ornamentales este año fueron –y por mucho– los mejores que se dio en el deporte mexicano en este año. Pero ese mismo organismo fue aquel que para el Mundial de Kazán 2015 inscribió a 36 nadadores con marcas falsas para que pudieran competir, eso sí y más grave todavía, con anuencia de la FINA.

Se me ocurrió un ejercicio ocioso: ¿cuánto costó mandar a 36 deportistas con marcas apócrifas (solo a los atletas, no entrenadores, no federativos ni staff) a Kazán, en un vuelo redondo que se compre hoy para que se trasladen en junio de 2016 (suponiendo que la FMN fue muy previsora)? Vaya, boletos baratos, pues, viaje redondo con dos escalas y no menos de 28 horas de viaje de ida y 34 de regreso?

En un sitio de internet, salió en 29 mil 786 pesos por cabeza. Es decir, un millón 72 mil 296 por los 36. Que por cierto, salieron de los bolsillos de los contribuyentes, vía Conade. Ya si contamos hospedajes por dos semanas (un hotel tres estrellas, lo mínimo básico), la cifra sube a un millón 573 mil 920 pesos. Y ya ni contemos viáticos ni en lo que salieron entrenadores y federativos.

Uy. Esa cifra duplica los 703 mil 580 que otorga el PND al ganador en categoría amateur y al Premio Nacional de Mérito Deportivo.

Sí señoras y señores: fue karma. Y tristemente, pagaron justos por pecadores, los clavadistas que hicieron las cosas bien y dieron resultados. El PND se lo debieron llevar Iván García y Germán Sánchez, quienes tienen preseas en todas las instancias del ciclo olímpico (Centroamerianos, Panamericanos, Olímpicos y Mundial), además de Jonathan Paredes, quien ya es doble medallista del orbe.

Para que las federaciones lo piensen dos veces antes de hacer trampa. Todo se paga.