El récord de los Chicago Bulls y el intento de Golden State por romperlo

Ocurrió en la 1995-96. Equipos como los Raptors y los Grizzlies iniciaron sus caminos en la Liga. Otros, como los Celtics y los Trail Blazers estrenaron estadio. 'Magic' Johnson regresó del retiro para jugar una campaña más con los Lakers. Pero la NBA pertenecía a los Chicago Bulls y a Su Majestad Michael Jordan. El cuadro dirigido por Phil Jackson tenía nombres como Scottie Pippen, Dennis Rodman, Toni Kukoč, entre otros, todos ellos liderados por Jordan. Terminaron la temporada regular con un registro de 72 victorias y sólo 10 derrotas. Cabe mencionar que de estos diez descalabros, solamente uno fue por más de diez puntos.

Entre sus logros, estos Bulls consiguieron el Larry O'Brian. Por otro lado, Phil Jackson fue nombrado mejor entrenador y Jordan se llevó el MVP de la temporada y de las Finales, su promedio de puntos por partido fue el más alto de la liga con 30.4. En playoffs, solamente perdieron 3 partidos, dos de ellos en las Finales ante Seattle. Fue mostrando un avasallador nivel como los Bulls impusieron una nueva marca en cuanto a mejor registro en temporada regular. Misma que hoy continúa imbatida y los Golden State Warriors se han propuesto superar.

Con 66 victorias y 7 derrotas, los Warriors amenazan superar el récord de aquellos Bulls. Al principio de la temporada, sonaba difícil que los de Oakland se acercaran a la marca. Hoy ocurre todo lo contrario. ¿Qué pasó para que el Golden State se 'robara' la NBA? Para entender el éxito de los Warriors en la campaña, se debe pensar más allá de Stephen Curry. No hay duda en que el desempeño de 'El chef' se refleja directamente en los resultados del Golden State. Sin embargo, delante del MVP hay un equipo, un conjunto entrenado por Steve Kerr que juega cada partido pensando en repetir como campeón. Dejando de lado los récords que pueden o ya han abatido.

El gran nivel de Curry –promediando 30 puntos por partido–, se complementa con la gran campaña que Draymond Green, líder en rebotes y asistencias, y Klay Thompson, segundo mejor promedio en puntos y asistencias, están teniendo. Además, jugando en el Oracle Arena no han perdido ni un partido. Esto significa que al jugar de local, prácticamente tienen garantizada una victoria. En este rubro, también amenazan a los Celtics de la 85-86, equipo que terminó con una sola derrota como local en la temporada. Los liderados por Larry Bird también terminaron campeones.

Ganar cuatro partidos más serán suficientes para acompañar a los Bulls en el pedestal del mejor récord. Un triunfo más los elevaría en lo más alto de la historia del deporte ráfaga. La gran noticia es que de nueve partidos restantes, seis son en Oakland, donde no conocen la derrota. La realidad es que estos Warriors no sólo se acercan a romper otro récord, o a ganar su segundo campeonato consecutivo. Una nueva dinastía del básquetbol se está formando en Oakland y la pregunta que debemos plantearnos es ¿hasta dónde llegará su poderío?