McGregor versus Diaz: La Ciencia de Superar las Ventajas de Alcance y Estatura

Hubo un tiempo en el que podías acusar a UFC de proteger la marca de McGregor mientras se elevaba entre la división de peso pluma sin enfrentar a uno de sus mejores luchadores. Tal vez UFC estaba preocupado por su estrella pero se ha vuelto claro que el mismo Conor McGregor enfrentará a quien sea. Perdiendo su tercer oponente por una lesión al último minuto y enfrentando a un nuevo peleador como reemplazo, ahora McGregor pidió un peleador de una división más pesada y ni siquiera solicitó que éste diera el peso límite de los ligeros. Valiente no es la palabra correcta para describirlo.

Pero subir de peso no es broma. Hay una razón por la que cada campeón bromea con hacerlo pero en realidad no lo hace —al menos de manera significativa. Hay una razón por la que los peleadores profesionales están dispuestos a someterse a cortes de peso— les gusta ser grandes para su división. Subir de división y ser el hombre más pequeño de la lista es un cambio enorme, especialmente si estás usando la fuerza y alcance en la división que acabas de dejar.

Hay y siempre han existido problemas con los oponentes de mayor tamaño. Primero está el alcance y la altura, y luego el peso. Uno puede ser un problema en la distancia, mientras que el otro es una pesadilla en la pelea desde cerca, una ventaja de doble filo para ser usada contra un oponente de menor tamaño.

Antes de que hablemos sobre las especificaciones de la pelea, analicemos un par de peleadores que han roto las leyes de tamaño en los deportes de combate. Pero primero, probablemente deberían ver el tercer episodio de Ringcraft para familiarizarse un poco con los hábitos de McGregor.

Una Breve Historia de Superar el Tamaño

La cuestión del tamaño ha sido una constante en las peleas desde el primer día. En un caso de habilidades iguales (o lo más cercanas posibles), el tipo de mayor tamaño debería ganar. Entre más grande sea la diferencia de tamaño y peso, más dependerá de que el peleador de menor tamaño tenga el conocimiento que le falta al otro, o que el más grande peleé de manera estúpida. Mientras el juego de las peleas progresa se vuelve más difícil creer que el hombre de menor tamaño traerá algo desconocido a la mesa, pero de vez en cuando tienen una sorpresa preparada.

Daniel Mendoza introdujo todo tipo de deslices e inclinaciones al pugilismo. Fue pionero del bloqueo de izquierda con derecha y de derecha con izquierda que se enseñan en las primeras clases de kickboxing hoy en día, conectaba a sus oponentes con golpes de revés y golpeaba los brazos de sus oponentes hasta que ya no podían usarlos más. Cientos de medios para lograr la ventaja sobre un oponente más grande y más fuerte en un día cuando el boxeo en realidad era solo lanzar la mano derecha. Un siglo después, Royce Gracie demostró lo mismo con su grappling. Su entendimiento de un área de la pelea que no solo no había sido considerada por muchos, le permitió derrotar hombres de mucho mayor tamaño.

Cada gran peleador que recuerdes ha traído algo inusual a la mesa. Marcelo Garcia arrasó en las competencias de jiu-jitsu con una combinación de guardias y el arrastre de brazo.

Kazushi Sakuraba tenía ese extraño estilo donde rutinariamente daba la espalda para invitar el agarre por la cintura y encajar una kimura, y esos derribos estilo John Smith.

Manny Pacquiao es el ejemplo más reciente de un hombre de poca estatura logrando subir de peso y tener más éxito contra oponentes de mayor tamaño y más agresivos. La guardia de zurdo de Pacquiao y su conformidad con su patrón de defensiva —entrar en ángulo, saliendo en ángulo, y nunca hacerlo sin mover la cabeza— ha significado que entre más agresivamente lo siga su oponente, puede conectar con más frecuencia sus combinaciones y moverse de lado. Antonio Margarito fue el peleador más grande que enfrentó Pacquiao y al moverse hacia los golpes de Pacquiao pero atrapándolo contra las cuerdas Margarito demostró ser perfecto para los ataques de Pacquiao.

El hombre que siempre estará en el número uno de esta lista, sin embargo, es Henry Armstrong. Hammering Hank ganó el título mundial peso pluma, subió dos divisiones para retar por el título wélter y se lo quitó a Barney Ross, luego regresó a ganar el título peso ligero y finalmente perdió una decisión controversial ante el campeón mundial de peso medio. Como lo dijo Bert Sugar, había ocho títulos mundiales en el boxeo en ese entonces, y Henry Armstrong tenía casi la mitad de ellos. Armstrong ganó sus peleas al acercarse a su oponente, colocando la cara contra su esternón y conectarlo con golpes al cuerpo y ganchos de derecha mientras golpeaba la cabeza de su oponente (de manera ilegal) con su hombro.

¿Cuál es el factor más común entre estos hombres? Sin importar el deporte en el que se enfocan en dos elementos clave: mitigaban el alcance, y mantenían el peso de su oponente lejos de ellos —usando su guardia de manera activa, movimiento lateral a la distancia, acomodando la cabeza por debajo de la de sus oponentes en la pelea de cerca. En cualquier pelea entre hombres de diferentes tamaños esos dos detalles están completamente fuera del debate: el alcance y la altura.

Características de la pelea

Conociéndolo, es un poco difícil de creer que Nate Diaz atrapará a Conor McGregor y usará su peso contra él. Diaz puede aporrear a un oponente desde el clinch, pero no es un luchador excelente y gran parte del tiempo —como su hermano mayor— se niega a llevar la pelea al suelo y usar sus habilidades de grappling a menos de que las cosas no le estén resultando en la pelea de pie.

Lo que Diaz hace tan bien es usar su alcance. Y su ventaja de alcance contra McGregor parece enorme. Recordemos que una ventaja de altura significa ventaja de alcance. Para verlo solo necesitas pararte frente a una pared y extender sus brazos al nivel de tus hombros para que las puntas de tus dedos apenas toquen la pared. Luego sube los brazos y verás que tu alcance es menor que cuando tus brazos están a la altura de tus hombros. Que la cabeza de tu oponente esté al nivel de tus hombros es una buena ventaja para los peleadores que lanzan buenos rectos.

En ninguna parte Diaz ha usado esto más efectivamente que en su pelea contra Michael Johnson. Diaz pacientemente esperó lejos, lanzando jabs para hacer que Johnson perdiera la concentración y la compostura. Luego el recto de izquierda empezaba a conectarlo.

Diaz continuó inclinándose hacia delante por la cintura para presentarle a Johnson una falsa distancia —un truco clásico de Roy Jones, Jr.— y mientras Johnson se acercaba, Diaz lo conectaba, retrocedía, y conectaba a Johnson con un gancho de derecha mientras retrocedía.

Aunque Johnson en rara ocasión recibió todo el poder del gancho, me recordó el estilo de Alexis Arguello.

Por otra parte, cuando Diaz lanza la izquierda a menudo la lanza de arriba abajo y se inclina por la cintura, presentando la barbilla como lo hizo José Aldo cuando se adelantó para conectar a McGregor y le entregó una victoria por nocaut en su pelea. Sin embargo, los contragolpes mientras el peleador se retira son considerablemente más difíciles de aplicar contra un peleador más alto y largo porque hay una distancia más grande entre los dos después de que el golpe se quedó corto y el peleador que se retira quiere contraatacar.

Pero se vuelve más complicado. En el boxeo el golpe puede ir tan lejos como el alcance, en las artes marciales mixtas el alcance solo te habla sobre un aspecto de la pelea. No solo las piernas son más largas que los brazos, sino que la pierna adelantada —la más cercana al oponente— es un objetivo legal. Incluso con una enorme desventaja de alcance, un peleador puede patear a su oponente en la pierna adelantada todo el día sin repercusiones.

El pateo de los hermanos Diaz nunca ha sido preciso. Lanzan un par de patadas ocasionalmente, pero parece que no las entrenan o que no les gustan las patadas bajas. Así que en lugar de bloquearlas, las reciben. Una ras otra. Y debido a que su pie adelantado está directamente frente a ellos para proteger su hombro adelantado y maximizar su alcance con el jab, pierden el equilibrio con cada patada que reciben en la pierna adelantada. Benson Henderson, Josh Thomson y Rafael dos Anjos tuvieron mucho éxito con las patadas contra Diaz mientras se colocaba frente a ellos esperando un intercambio de boxeo.

Con eso, Nate tiene una patada frontal buena que usará o hará una finta para conectar su jab.

No puedes hacer movimientos rápidos sin que tus dos pies estén en el suelo, es un concepto básico en las peleas. Para un peleador de menor tamaño, hacer que el oponente levante la pierna del piso (obligándolo a bloquear patadas) le dará al de menor tamaño buena oportunidad de acercarse y conectar un golpe. Melvin Manhoeff era excelente para esto, Demetrious Johnson lo ha hecho en varias ocasiones, Renan Barao tumbó a Urijah Faber mientras estaba sobre una pierna preocupándose por las patadas y aquí está Michael Bisping demostrando el mismo principio hace varios días contra Anderson Silva.

Y Yoel Romero:

Pero el gusto de McGregor últimamente se inclina por las patadas lineales. La patada frontal baja (no una ventaja contra un zurdo), la patada frontal al abdomen, la patada de giro y la patada de giro con salto. Ciertamente Diaz parece evitar defender su cuerpo gran parte del tiempo, pero como pelea en una guardia de lado y estas patadas por lo general se concentran en conectar por en medio, las costillas o el hígado, será interesante ver el objetivo que presentará la guardia de Nate para las patadas.

Para enfocarnos en McGregor, tendrías que esperar ajustes considerables en su estilo al subir de peso y no tener una ventaja de tamaño. Mientras que podía mantenerse a distancia y conectar sus rectos de izquierda contra Chad Mendes, José Aldo y muchos más, tendrá que moverse lejos del alcance del jab de Diaz para conectar sus golpes. B.J. Penn a menudo es recordado como un buen ejemplo de un peleador que subió de división, pero recordarás que contra golpeadores competentes no ganó muchas peleas cuando no tenía la ventaja de alcance porque dependía mucho en su boxeo y sus jabs.

Y eso es una parte interesante de este combate zurdo versus zurdo. McGregor no usa su jab con mucha frecuencia o con tanta destreza, porque a menudo puede empezar sus ataques con el recto de izquierda. Casi no usa ganchos. Cuando un zurdo enfrenta a otro zurdo es como una pelea convencional de diestro contra diestro, la pelea se centra en la mano adelantada de nuevo y las oportunidades más fáciles para los rectos de izquierda ya no están tan disponibles.

Otro punto que es muy importante en el juego de McGregor—particularmente en el contraataque— es entregar espacio para invitar a que el oponente se extienda demasiado lanzando un golpe. Nate Diaz ha demostrado que su jab doble o triple es excelente cuando su oponente le da espacio. Sin mencionar que dar espacio retrocediendo —y en ocasiones moviéndose en ángulos— es bueno para lo peleadores altos. Hacer lo mismo contra un peleador de mayor altura puede ser peligroso.

Estrategias Ideales

Nunca me han importado los títulos de "Mejor de todos los tiempos" así que me permitiré ser un poco cruel cuando se presenta un buen peleador. Digo "Eso fue bueno, pero me encantará verlo enfrentar a x o y". Y para darle crédito a McGregor parece dispuesto a enfrentar a quien sea.

Sí, esta pelea es de último minuto y si, su oponente no es el tipo de costal para el grappling que le dará una gran prueba al subir de división, pero McGregor también es un peleador al que le gusta su distancia y sus contras mientras retrocede. El boxeo de Nate Diaz es un reto enorme para esas dos habilidades de McGregor. Claro, la adaptabilidad de McGregor siempre ha sido su habilidad más admirable. Le tomó poco tiempo derrotar al último zurdo que enfrentó, Dustin Poirier. Poirier elevaba su antebrazo para atrapar los rectos de izquierda, así que McGregor comenzó a lanzar ganchos por encima del codo de Poirier. Claro, Diaz no es como Poirier, pero en esa pelea McGregor nos demostró algo que no habíamos visto antes.

De McGregor me gustaría ver patadas al cuerpo de las que se siente tan orgulloso y con las que tiene tanto éxito, pero con esa pierna adelantada lista para ser conectada sería un error no lanzar patadas bajas. Con suficiente enfoque en las patadas bajas y convenciendo a Diaz a alejarse de las izquierdas, la patada alta de izquierda de McGregor podría ser una pieza clave. Además, ambos Diaz odian que sus oponentes usen movimiento lateral. Su guardia hace que giren con lentitud, así como B.J. Penn contra Frankie Edgar. Y claro, los golpes rectos pueden ser mucho menos efectivos al moverse consistentemente de lado a lado.

De Diaz esperaría que intente superar a McGregor en fuerza por un rato en cada round y llevarlo al suelo cuando tenga la oportunidad. Siempre que un hombre con una ventaja de tamaño y un grappling respetable no busque derribar y controlar a su oponente estará peleando de manera cuestionable. Trabaja bien con el agarre doble de cuello y rodillas y es un buen recurso para un peleador alto. No conecta al cuerpo con tanta frecuencia como su hermano mayor pero contra un peleador que depende tanto de la velocidad y calculo del tiempo, los golpes al cuerpo pueden causar caos y desarmar efectivamente la amenaza de los contras significativos en los últimos rounds.

Lo que más me gustaría ver de Diaz es la paciencia que mostró al enfrentar a Michael Johnson. Hay tipos que batallan cuando los atacas rápidamente, y lo hizo de manera perfecta contra Donald Cerrone. Pero una ventaja de alcance se establece y luego la pelea se construye a su alrededor, no es algo que se use para peleas llenas de intercambios y finalizar rápido las peleas. Los jabs que lanzó contra Johnson, calculados justo cuando Johnson se adelantaba o se recuperaba de patadas, arruinaron los ataques del respetable peleador de kickboxing, lo hicieron retirarse, y escondió los golpes de izquierda de manera brillante.

Por último, aunque esta pelea se llevará a cabo en 170 libras, por favor no piensen que eso representa que cualquiera de los dos puede enfrentar a la élite de peso wélter en su estado actual. Se habla de que la pelea se está usando para programar la pelea McGregor vs. Lawler en UFC 200, y eso sería bastante divertido, pero el top diez de peso wélter está lleno de peleadores enormes que cortan mucho peso para llegar a las 170 libras. La diferencia entre Johny Hendricks y Tyron Woodley volviéndose pasas para llegar a las 170 libras y McGregor y Diaz cuando no están cortando peso es enorme y esta pelea debería ser tratada como una pelea en peso pactado de último minuto más que una pelea en la división wélter. Nate Diaz tuvo una carrera respetable en peso wélter y una carrera respetable ahora en peso ligero—McGregor logrando la victoria ciertamente justificaría la pelea contra Rafael dos Anjos que todos queremos ver.

Sin importar quien se lleve la victoria, regresen a Fightland el lunes y hablaremos de lo mejor de la noche.

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