Publicidad
Relacionados: Cosas que hay que saber antes de visitar Cuba
En Ecuador, sin un trabajo mínimo, a deshoras el dinero con el que viaja se reduce. Temiendo cuitas mayores, se resignó a incorporar todas las moderaciones que le fueran posibles. El 25 de noviembre, al cenar en Cotocollao, Viamonte rompía la abstinencia que se prometió a sí mismo de no volver a gastar un centavo en comidas quiteñas callejeras. Lo había dominado, finalmente, tras echar un pulso mezquino, el aroma a pollo que exhalaba un asador rotatorio.Para un cubano las noches al norte de Quito son árticas. La pieza en la que Viamonte pernocta es pequeña y por la trabazón de las ventanas se cuela el aire de afuera. Viamonte se estrega los hombros, se sopla las manos y se cubre con una colcha deslavada en la que se adivina el verde de los arabescos. En la mañana, antes del desayuno —una taza de leche que va a empeorar los dolores estomacales— abre Facebook y se encuentra con la noticia de que Fidel Castro —el hombre a quien vilipendia, el hombre a quien culpa de su salida de Cuba aun sin motivo personal ninguno— ha muerto.
Publicidad
Publicidad
Relacionados: Qué comer cuando visites Cuba
Ralph Gonsalves, primer ministro de San Vicente y las Granadinas, declaró que el Comandante en Jefe fue una figura de talla mundial y está en el panteón de los líderes que han dedicado su vida a los pobres de la tierra. Gonsalves agregó que más del 90 por ciento de los habitantes del mundo está de luto, y que las únicas personas que no pueden estarlo apoyan el imperialismo.El embajador de la Unión Europea en Cuba, Germán Portocarrero, dice que con Fidel desaparece la última fibra política intelectual del Siglo XX.A las 10:10, Granma en su cobertura especial publica: La juventud cubana defenderá el legado del Comandante. A las 18 y 55: Cuba no le dice adiós a Fidel sino un #HastaSiempreComandante. Anteriormente, a las 18 y 25: Un dibujo, una flor. El sentir de los niños cubanos en la Plaza de la Revolución. ¡Hasta siempre Comandante!
Publicidad
Publicidad
Relacionados: En fotos: cómo el turismo está transformando Cuba
También brinda y celebra con otros cinco cubanos en un bar y se desploma como un beodo insalvable el domingo a las 4 AM.A todo conocido que encontrará, en adelante, por las calles de Barcelona, les pedirá: "felicítenme, que murió la rata" y ellos, justamente, lo felicitarán.Alejandro tampoco tardó en llamar a su abuelo en Cuba, que a los 90 años debió estallarle el pecho de felicidad. No hace mucho, el anciano resolvió librar una batalla particular, una suerte de carrera o una carrera de suerte: Ver quién partía primero de este mundo, si él o Fidel Castro.Lo que lamentó Alejandro fue un correo electrónico que recibió de su padre, avisándole que iba a despedir a Fidel a la Plaza. Todavía no lo ha confirmado, pero si son en serio las intenciones, amenaza con cortarle radicalmente las remesas, al menos por 6 meses, para que su padre vaya y pida en la Plaza de la Revolución, la leche y la carne que compra con lo que su hijo hasta hoy le envía.
Publicidad
Publicidad
Relacionados: Así viven los cubanos la llegada del wifi
La distancia hace que una se vuelva incrédula y un poco glacial, viendo las cosas precisamente desde esta distancia tan envenenada, dice Amelia.Westchester, condado de Miami-Dade. A las once de la noche, Yasmani no puede dormir por el alboroto de los vecinos. Sospecha que ha ocurrido algo tremendo. Entra a su cuenta de Facebook y allí, se manifiesta, de distintas formas el hecho. Fidel murió. Dentro del galimatías que es Yasmani a las once y cuarto, una idea temeraria se extrae en claro: Ha desaparecido el peor dictador del Siglo XX —peor que Stalin— y empieza un proceso de cambio y sanación de la sociedad cubana.La enormidad del suceso incita a Yasmani para que transcurra lo que queda de la jornada en vela; saca la guitarra, pues, y compone. No le nacerá ni ejecutará, sin embargo, un animado allegro.