Hablamos con el hombre que le destrozó la nariz a Louis Van Gaal

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Hay un misterio en el fútbol europeo que nos corroe. Así sin exagerar ni nada, se trata de una incógnita como mínimo tan grande como la existencia los extraterrestres o la vida después de la muerte. Y es que hace muchísimos años ya que nos lo preguntamos. Por suerte, el periodista belga Raoul de Groote nos ofrece una solución a la gran duda que hace décadas que nos atenaza.

¿Quién rompió la nariz del entrenador holandés Louis Van Gaal y la dejó inclinada para siempre?

El ex portero belga Frank Buysschaert, de 61 años, ha resultado ser la clave definitiva para resolver el misterio. Al parecer, la nariz de Van Gaal se rompió en algún momento de los años 70 en un partido amistoso entre los equipos KV Kortrijk y Royal Antwerp FC Erstligist, club este último en el que Louis jugó entre 1973 y 1977.

"Sí, yo estaba allí", aseguró Buysschaert al periodista De Groote. Fue concretamente un sábado por la tarde: "Yo solo tenía 18 años y acababa de regresar del servicio militar. Van Gaal ese día jugó de delantero", recuerda el belga, que entró como suplente en la segunda mitad.

"El Royal Antwerp mandó un pase profundo y mis defensas se quedaron quietos pensando que había fuera de juego", explica Buysschaert. "Sin embargo, el árbitro dejó seguir. Van Gaal intentó llegar al balón, así que yo salí corriendo a despejar con el pie porque la pelota aún no había entrado en el área. Chocamos y mi codo golpeó su nariz. Fue un impacto muy duro".

Buysschaert rememora el momento, que debió ser terrible, apocalíptico: "Van Gaal cayó al suelo y rápidamente quedó cubierto de sangre. Una nariz rota sangra mucho, ¿sabéis?", explica el antiguo cancerbero.

I want Van Gaal to become next MUFC manager because he has a great nose, it's everything the club stands for pic.twitter.com/hUm8XhYN5h
— Josh Bradley OBE (@JoshuerBradley) 23. April 2014

Buysschaert, a pesar de los años, nunca ha olvidado el accidente, tras el cual Van Gaal tuvo que ser retirado en camilla. "Lo viví en primera persona, justo delante de mis ojos", asegura, "aunque yo no pude hacer nada. Fue un accidente", se disculpa Frank.

¿Cómo de fuerte fue el golpe de Buysschaert a Van Gaal? Hay una anécdota bastante ilustrativa: resulta que nuestro buen Frank era culturista. En el Gimnasio de Bill de la ciudad de Kortrijk, Buysschaert aparece como tetracampeón de la ciudad. "Me entrenaba fuerte, pero naturalmente lo hacía sin ningún apoyo médico. Yo era soldador, así que me hice mi propia máquina de 'fitness' en casa".

Tras el incidente, Buysschaert nunca volvió a coincidir con Van Gaal. "Él vive en otro mundo, yo sólo soy un hombre común de clase obrera", explica Frank. Sus formas de vida han cambiado muchísimo desde ese día: a pesar de ser un futbolista mediocre, Van Gaal se labró una exitosa carrera como entrenador; Buysschaert solo jugó dos temporadas en el KV Kortrijk debido a una enfermedad grave.

"Pasé mucho tiempo paralizado, estuve en coma, y de hecho casi me muero por una bacteria que había en el estiércol de caballo", explica Buysschaert. Su carrera profesional terminó antes de empezar.

Hoy Buysschaert todavía practica deportes como el 'running' o el ciclismo, pero de forma ocasional. Van Gaal, en cambio, vive en uno de los grandes centros de atención del fútbol mundial y gana millones de euros. Sin embargo, incluso el egregio Louis tendrá siempre una señal que le impedirá olvidarse del lugar del que viene: un desperfecto en la nariz causado por un soldador belga en algún momento de los años 70.