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Futbol americano

Las lesiones en la NFL de cara a la temporada 2016

La salud de algunas de las grandes estrellas de la NFL pone en riesgo su participación en la próxima temporada.
Foto: John Rieger USA Today Sports

Hablar de la NFL es hablar de la liga deportiva mejor organizada y más lucrativa que existe y esto es un hecho que no da opciones a debate. Es un espectáculo global que mueve miles de millones de dólares todos los años y que produce en sus aficionados niveles de locura que ningún otro deporte puede generar. ¿O dime, te parece muy sensato pagar en reventa $125,000 por un boleto para el partido que los Raiders y los Texans jugarán en México el próximo 21 de noviembre, aun sabiendo que el costo original de dicha entrada son "sólo" $7,139 incluyendo el famoso cargo por la venta del boleto?

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De acuerdo a la revista Forbes, las ganancias esperadas por la liga para la próxima temporada, contemplando ya los contratos televisivos y todos los ingresos acumulados serán de 13,300 millones de dólares, esto ya descontando el generoso sueldo de su comisionado general Roger Goodell, que cobra 34.1 millones por año.

Pero, ¿cómo se ha llegado a estos niveles? Sin buscar entrar en un análisis financiero que podría resultar tedioso, la respuesta está en la calidad del espectáculo. Cada detalle, por minúsculo que parezca, está perfectamente cuidado. Todo lo que sucede antes, durante y después de un partido es parte de una maquinaria perfectamente planeada y aceitada, que tiene como finalidad que la experiencia del aficionado sea no sólo "emocionante" sino imposible de comparar con cualquier otra experiencia deportiva. Y sin duda, para lograr este nivel de adrenalina, la exigencia a la que están sometidos los jugadores, activos principales de esta liga, se ha incrementado de forma exponencial.

Algunas voces dicen que para lo que cobran esos jugadores, es lo menos que se les podría exigir pero la realidad es que cada vez es más frecuente enterarse de jugadores que están dispuestos a renunciar a millones de dólares y que deciden retirarse con sólo 2 o 3 años como profesionales, pues las afecciones que la exigencia ha dejado en su salud pueden llegar a tener consecuencias irreversibles. Uno de los ejemplos más recientes de esto se vivió al inicio de la temporada pasada, cuando Chris Borland, linebacker de los 49ers de San Francisco decidió retirarse en Marzo de 2015, con apenas 24 años de edad y 1 año en la liga. En una entrevista que ofreció, mencionó que esto era por los riesgos futuros de lesiones permanentes como consecuencia de los constantes golpes en la cabeza. Algunos especialistas proyectaban que si Borland hubiera tenido una carrera completa en la NFL, hubiese cobrado al menos 120 millones de dólares dentro del profesionalismo, pero si, la salud es primero.

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Por todo lo anterior, las lesiones son cada vez más frecuentes, y de cara a la próxima temporada, ninguna lesión ha sido tan mediática como la sufrida por JJ Watts. Hablamos de uno de los jugadores más constantes (nunca se ha perdido un partido en su carrera, incluso el año pasado llegó a jugar con una mano fracturada y una lesión muscular en la ingle) y quizá el mejor defensivo de la liga, un liniero de 131 kg de peso, 1.96 m de estatura y una velocidad sorprendente para alguien de sus dimensiones. La temporada pasada logró 17.5 capturas de mariscal de campo para liderar a la NFL en esta estadística por segunda vez en su carrera (En 2012 lo hizo por primera ocasión tras lograr 20.5 capturas). Para redondear su currículo, ha sido nombrado "Defensivo del Año" en 3 de las 5 temporadas que lleva como profesional.

Pues bien, el pasado 21 de julio, Watts tuvo que ser operado de una lesión en la espalda y de acuerdo a un tweet de John McClain, uno de los periodistas especializados en la NFL más reconocidos del mundo, se hablaba de una rápida recuperación que le aseguraría estar listo para el inicio de la campaña. No olvidemos que esta es la segunda operación mayor que sufre JJ Watts en los últimos 6 meses ya que en enero le tuvieron que reparar 5 músculos que estaban total o parcialmente desgarrados en la ingle. Reportes recientes han mencionado que su recuperación podría llevar más tiempo del previsto, incluso la NFL lo mencionó desde su cuenta oficial de Twitter. Aquí la pregunta es, ¿qué implicaciones tendría para los Texanos de Houston el no poder contar con su defensivo estrella al inicio de la temporada?

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— JJ Watt (@JJWatt)25 de julio de 2016

Houston inicia la temporada regular el 11 de septiembre recibiendo a los Osos de Chicago. En la semana 2 recibirán a los Jefes de Kansas City para posteriormente visitar a los Patriotas de Nueva Inglaterra en uno de los partidos más duros que tendrán en la campaña. Todo conocedor sabe que dentro de la NFL, la defensiva es quien te gana los juegos importantes y perder a tu mejor hombre sin duda te pone en franca desventaja. Las distancias en la NFL son tan cortas que un juego, una derrota puede ser la diferencia entre clasificar a playoffs o quedarse fuera. La temporada pasada, los Texanos calificaron con una marca de 9-7, sólo un juego por delante de Indianápolis que cerró su temporada con 8-8.

La ausencia de Watts al inicio de la temporada aún no está confirmada. Lo que sí sabemos es que iniciará los campamentos de entrenamiento de su equipo en la "PUP list" (Physically Unable to Perform) y que en el escenario más optimista, estaría listo para el partido inaugural, perdiéndose todos los entrenamientos y los 4 partidos de pretemporada de su equipo.

Pero JJ Watts no es la única estrella que enfrenta una situación similar. Jamaal Charles, corredor estrella de los Jefes de Kansas City fue puesto también en "PUP list" debido a una lesión. El pasado octubre, el corredor sufrió la rotura de ligamentos y fue sometido a su segunda cirugía de rodilla en los últimos 4 años y la recuperación ha llevado más tiempo del previsto. Si bien su panorama es más alentador, la realidad es que al día de hoy no se encuentra al 100%. A lo largo de su carrera, Charles ha acumulado 7,220 yardas totales, 62 anotaciones (40 de ellas por la vía terrestre) y un promedio de 5.5 yardas por acarreo.

Jordy Nelson, receptor estrella de los Packers de Green Bay, perdió toda la temporada pasada por una lesión y actualmente está enfrentando problemas con su rodilla. Si bien el jugador habla de algo menos y se declara seguro de estar listo, la realidad es que no existe una predicción oficial sobre su regreso a los terrenos. Aaron Rodgers, QB de su equipo ha declarado que Nelson es "un tipo especial, un jugador de suma importancia para su ofensiva" y reconoció que su ausencia el año pasado fue una de las causas del pobre desempeño ofensivo de los Empacadores en la temporada.

Bennett on WR Jordy Nelson: I see him putting everything he has into (his rehab). Talk about being a true pro, that's Jordy Nelson.

— Green Bay Packers (@packers)29 de julio de 2016

Ahora, no sólo las lesiones están poniendo en riesgo la continuidad de las grandes estrellas. Las suspensiones han tomado un papel de suma relevancia y en este rubro, nadie más mediático que Tom Brady para comenzar. El QB de los Patriotas de Nueva Inglaterra iniciará la temporada suspendido por 4 partidos como resultado del famoso caso "Deflategate". Recientemente anunció que no apelaría el caso y que aceptaría su suspensión para cerrar ya de una vez dicho capítulo. Junto a Brady, el corredor estrella de los Steelers Le'Veon Bell sufre una suspensión de 4 partidos por violar las Políticas de Sustancias Prohibidas de la NFL

Seguramente en las siguientes semanas y ya con los entrenamientos de lleno, la lista de jugadores lesionados se verá incrementada. El nivel de exigencia es cada vez mayor y la presión a la que estos jugadores someten a sus cuerpos tarde o temprano tiene que cobrar una factura.