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El Real Madrid eliminado de la Copa del Rey

El Real Madrid empezó el 2017 con el pie izquierdo.

El año no arrancó del todo bien para el equipo merengue. Después de disfrutar un 2016 plagado de marcas históricas, buen funcionamiento colectivo, trofeos —individuales como de conjunto—, y un cordial ambiente en el vestidor gracias al año de ensueño de Zidane al frente del club más glamuroso del futbol, el primer mes del 2017 ha sido todo lo contrario.

Primero, el Sevilla cortó de tajo la racha invicta de 40 partidos del Real Madrid con una remontada en casa. Ambos se habían enfrentado a media semana por la Copa del Rey con resultado a favor de los Merengues. Sergio Ramos, el amo y señor de los goles dramáticos de último minuto, tuvo una noche desafortunada al anotar en propia puerta y provocar la remontada del equipo sevillista.

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Segundo, Cristiano Ronaldo ha bajado mucho su rendimiento deportivo, luego de haber ganado una cantidad inimaginable de trofeos el año pasado, y el Real ha sufrido el bajón de nivel del portugués. Tercero, los soldados del Madrid se fueron cayendo uno a uno, convirtiendo a Valdebebas en un hospital y dejando a Zidane sin muchas opciones en la banca para enfrentar su trascendental compromiso de cuartos de final en la Copa del Rey ante el Celta de Vigo, encuentro que perdió 2-1 en la ida —ante su gente— y que lucía complicado de ganar por la desventaja en el marcador y por el mal momento que atraviesa el conjunto.

El horrendo inicio de año de los madridistas se confirmó el día de hoy al quedar eliminados de la Copa del Rey, gracias a una serie de desafortunados eventos.

Al 25', Cristiano estrellaba el balón en el larguero y poste —en cuestión de menos de dos segundos—. Después a un minuto del final, Danilo encajaba en propia puerta para acrecentar aún más la ventaja del Celta.

— Joaco Lopez (@joacolopezg)25 de enero de 2017

CR7 se sacaría la espina con un portento de gol de tiro libre, pero Wass encontraría la tierra prometida a cinco minutos del final. Lucas Vázquez empataría en al prórroga, pero no le alcanzaría para vestirse de héroe —o de Sergio Ramos, que es lo mismo— y así el Madrid se despedía del torneo de su majestad el rey.

Esperemos que a Florentino no le dé un arranque de ira, de esos que suele tener siempre que su equipo queda eliminado de cualquier competición, y planee hacer un limpia este verano.