Alex Rodríguez: del amor al odio

El draft de 1993 es recordado por la llegada de Alexander Emmanuel Rodríguez al béisbol profesional. Alex Rodríguez era un joven shortstop proveniente de "Westminster Christian School" de Miami y de forma unánime le llenó los ojos a todos los buscadores de talento. Combinaba velocidad con gran fortaleza física y un talento por encima del promedio para hacer contacto. Además, defensivamente hablando era muy completo; era el siempre deseado "jugador todo terreno", ese que puede aportar en las 5 principales categorías ofensivas (AVG, R, RBI, HR y SB) y es garantía en su posición. Los Seattle Mariners tenían la primera selección global de ese año y sin duda lo eligieron.

Sus primeros años fueron sorprendentes, Entre 1994 y 1995 pasó tiempo fogueándose en las Ligas Menores aunque tuvo la oportunidad de debutar y comenzar a sumar estadísticas. Debutó con 18 años y 11 meses, tan sólo el tercer campocorto en hacerlo con 18 años desde 1900. En esos primeros 2 años acumuló sus primeros 5 cuadrangulares, 19 carreras anotadas, 21 producidas y 7 bases robadas.

Fue en 1996 cuando explotó. Ese año se consolidó como superestrella, logrando 215 hits, 141 carreras anotadas, 36 HR, 56 dobles, 123 RBI y 15 bases robadas, todo esto con un porcentaje de bateo de .358. Además debemos considerar que durante la campaña se perdió 16 partidos que de haberlos jugado, sus totales hubieran sido aún más impresionantes.

Lo que lo llevó a lo más alto fue su consistencia. Fue el primer SS en ganar un título de bateo en casi 40 años, rompió la marca de HR de la Liga Americana para su posición (42) y se convirtió en apenas el tercer miembro del club 40-40 (40 HR y 40 bases robadas en una temporada) en toda la historia de las Grandes Ligas, y todo esto antes de cumplir 23 años. Fue el jugador más joven en llegar a 100, 200, 300, 400, 500 y 600 cuadrangulares respectivamente.Tenía el talento para ser el mejor jugador de todos los tiempos.

Todo este talento se vio recompensado en sus ingresos. Para la temporada de 1997 ya superaba el millón de dólares anuales y su salario se incrementó en un millón extra por año hasta la temporada 2001, cuando los Rangers de Texas sorprendieron al mundo entero al firmar el contrato más lucrativo en la historia de cualquier deporte: ¡$252 millones de dólares por 10 temporadas!

Lo más sorprendente de este contrato fue la forma en que se reaccionó ante él. Si bien existía cierto escepticismo, más por la duración del contrato que por la cifra, la mayoría de los especialistas lo veían como algo acertado a pesar de que nunca antes había sucedido algo así. Anterior a A Rod, el contrato más lucrativo del deporte lo tenía el basquetbolista Kevin Garnett que percibía 126 millones de dólares durante 6 años. Con el contrato de Rodríguez, se abrió la caja de Pandora. Ese año tan sólo en las Grandes Ligas, Derek Jeter, Manny Ramirez, Todd Helton y Mike Hampton firmaron contratos valuados en más de 120 millones de dólares.

Si el contrato con los Rangers había sido histórico, en 2004 el mundo se sorprendió al ver que los Yankees anunciaban la contratación de A Rod por 10 años y 275 millones de dólares. Los Rangers aceptaron la cesión de su estrella. Rodríguez pasó a los "Mulos de Manhattan rompiendo de nueva cuenta el mercado, U$169,753 por cada uno de sus siguientes 1620 partidos. Sólo por estadística, este contrato le aseguraba a Alex Rodríguez superar los U$375 millones a lo largo de su carrera, más del doble de lo que cualquier otro deportista había ganado en aquella época.

La luna de miel llegaría a su fin unos años después. El 13 de diciembre de 2007, el antiguo senador de los Estados Unidos George Mitchell emitiría el funesto "Reporte Mitchell", donde hacía públicas las investigaciones de dopaje sistemático en las Grandes Ligas. En dicho reporte aparecían los nombres de 50 peloteros, mucho de ellos estrellas de alto perfil, como consumidores frecuentes de esteroides. El nombre de Alex Rodríguez no fue incluido, pero muchas voces, especialmente la de José Canseco, expresaron su sorpresa de no verlo involucrado en el escándalo. Esa fue la primera vez que se le relacionó en algo turbio. Cuatro días después, el 16 de diciembre, en una entrevista para el programa "60 minutos", declaró categóricamente que jamás había consumido sustancias dopantes.

El siguiente escándalo llegó unos meses después. El mismo José Canseco publicó un libro titulado "Vindicated" donde acusó de forma directa a A Rod y a muchos más de ser consumidores frecuentes de esteroides. A Rod lo niega nuevamente y si bien no estaba imputado formalmente en problema alguno, en la conciencia de los aficionados la duda estaba sembrada.

La bomba explotó 2 años después, el 7 de febrero de 2009. "Sports Illustrated" publica en su sitio web que tenían en su poder las pruebas de que en el 2003, Alex Rodríguez había dado positivo por "Primbolan" y por testosterona sintética. Tan sólo 2 días después A Rod se vio obligado a aceptar públicamente que sí se había dopado de forma recurrente entre 2001 y 2003. El mito se rompía: no sólo había recurrido a sustancias prohibidas, también había mentido públicamente.

Los siguientes días fueron un circo mediático. Las notas más turbias del escándalo se hicieron públicas incluyendo los nombres de muchos involucrados dentro de los cuales sobresalía el primo de Alex Rodríguez. Para estas alturas su imagen pública estaba rota. Los aficionados se sentían engañados y con justa razón y aquí es conveniente hacer una precisión. En la época en la que admitió haber consumido esteroides, técnicamente no estaba violando las reglas. Moralmente por supuesto que había un daño pero las Grandes Ligas no tenían una política de uso de sustancias por lo que no había "crimen que perseguir". Además, en esa época, se podría decir que A Rod competía "en igualdad de circunstancias" ya que se ha mencionado que cerca del 60% de los peloteros habían consumido al menos en una ocasión.

El 4 de agosto de 2010, Rodríguez conectaba el cuadrangular 600 de su carrera, apenas el cuarto pelotero en lograr esa hazaña pero el hecho siempre fue cuestionado. La afición lo sentía como algo ilegal y fueron pocos los que realmente honraron la hazaña. En los años siguientes, el rompimiento entre el pelotero y los Yankees se hizo evidente. En muchas ocasiones se le mandó a la banca en momentos claves y Alex externó su molestia en múltiples ocasiones. En los campos visitantes, la afición lo abucheaba de forma recurrente y su desempeño, especialmente en partidos de postemporada se vino abajo.

29 de enero de 2013. El Miami New Times publica un documento sobre Biogénesis, una clínica especializada en el dopaje sistemático y el nombre de Alez Rodríguez destacaba en el informe, junto al de muchas otras estrellas como Ryan Braun. El representante de Alex negó la legitimidad del documento pero en realidad nadie creyó dicha declaración. Mientras tanto, Alex Rodríguez se recuperaba de una segunda operación de cadera y rumores indicaban que estaba buscando junto a su equipo médico una estrategia que le permitiera declararse "Unable to play" (Incapacitado para jugar por razones físicas), con lo cual pudiera retirarse y aun así, cobrar los más de U$100 millones que se le adeudaban al momento. Mientras tanto, Ryan Braun aceptaba una suspensión de 65 juegos por el tema Biogénesis con lo cual, la presión sobre A Rod aumentaba.

En esas fechas, Bud Selig era el comisionado en las Grandes Ligas y su mandato estaba por terminar. Selig quería que su legado fuera una lucha frontal contra el dopaje y para dejar constancia de esto, el 5 de agosto de 2013 anunció un castigo ejemplar y sin precedentes contra Alex Rodríguez. 211 partidos de suspensión sin goce de sueldo, ¡una temporada y media! No habría más tolerancia ante el doping y para probarlo, le damos una sanción histórica al atleta más mediático que tenemos. Ante lo sucedido, A Rod declaró: "Nada de esto está siendo fácil, todo ha sido demasiado demandante. Por supuesto que he cometido errores en el camino, pero ahora estamos aquí. Soy un ser humano. Tengo que defenderme. Si no me defiendo, nadie más lo hará por mí".

A partir de ahí Alex descubrió algo totalmente nuevo para él. Su propia afición, los aficionados a los Yankees lo abuchearon en el partido inaugural de la temporada 2013. Le recriminaban las mentiras. A Rod estaba siendo crucificado no sólo por usar sustancias sino por mentir airada y repetidamente. Eso era lo que no podían perdonarle. Después de una ola de apelaciones, Rodríguez pudo seguir jugando pero la temporada transcurrió entre abucheos y reiterados pelotazos de los pitchers rivales hasta que a finales del año, en octubre de forma precisa, tomó una decisión controvertida: demandar a las Grandes Ligas y a su comisionado Bug Selig, argumentando una "caza de brujas". Ahí terminó por ganarse el odio de todos. El resultado final de todo el proceso legal fue una suspensión reducida a 162 partidos, es decir, toda la temporada 2014 por supuesto, sin goce de sueldo.

A su regreso en 2015 tuvo una muy buena temporada considerando su edad (33 cuadrangulares y 86 RBI; ganó el premio "Regreso del año"). La temporada 2016 por el contrario ha sido la peor de su carrera al grado que su manager, Joe Girardi, lo ha relegado a funciones secundarias a pesar de los 20 millones de dólares que está cobrando por este año.

Finalmente se anunció que el viernes 12 de agosto fue su último partido como jugador con los Yankees. Existen rumores de que algunos equipos, especialmente los Marlins de Miami están interesados en él. De suceder esto para la próxima temporada le pagarían sólo el salario mínimo de las Mayores (U$507,500) y los Yankees seguirán obligados a pagarle la diferencia.

Alex Rodríguez pasó de ser el mejor y más amado pelotero a un jugador odiado y un estorbo de 20 millones de dólares por año. Su potencial retiro se da con más pena que gloria. Hoy podríamos hablar del más grande, podríamos estar viviendo el retiro más dolido de una generación pero no, la sucesión de malas decisiones hicieron que su legado quedara en el olvido..¿Y el Salón de la Fama? Esa será la gran interrogante. Las otras estrellas de su generación implicados en el dopaje están (y tal parece que seguirán) fuera de Cooperstown. Mientras tanto, Alex Rodríguez sufrirá del repudio público mientras disfruta los casi U$400 millones que ha cobrado al momento.