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diez preguntas

Diez cosas que siempre quisiste preguntarle a un relator de eSports

“A Argentina le falta mucho crecimiento en los eSports y en parte es nuestra cultura la que traba el desarrollo. La propia escena, en su afán de mejorar, a veces se autoboicotea”
Foto cortesía de Zombyra

Artículo publicado por VICE Argentina

Lejos han quedado las épocas en las que pasar todo el día conectado a una consola o detrás de una pantalla estaba considerado como pérdida de tiempo. Hace mucho que la industria de los videojuegos ha distendido su estratificación a tal punto que no sólo el jugador puede hacerse una carrera compitiendo en distintas ligas de eSports, sino que, como en cualquier otro deporte, diversos actores alrededor de la competencia han comenzado a quedarse con una rebanada de la torta. Espectadores no faltan y nunca han faltado, si se piensa bien. ¿No había detrás del jugador más hábil de King Of Fighters siempre una pléyade de mirones, como encantados por las combinaciones sin fin? Según números oficiales del circuito oficial de League of Legends, el Torneo por Invitación de Media Temporada (MSI) del año pasado registró más de 360 millones de visitas únicas. Si tenemos en cuenta que las finales 2017 de la NBA promediaron 20 millones de espectadores, podemos calcular la magnitud que han cobrado los eSports en los últimos años.

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Las transmisiones también se han sofisticado con el tiempo. Desde los precarios casts de los viejos foros de LoL en español hasta las superproducciones de competencias internacionales de hoy en día, el cambio puede parecer drástico. Y si bien el papel de relator es inherente a la transmisión, hasta hace poco no se había “profesionalizado”. Aun así, ¿se puede vivir de comentar partidas de videojuegos en Latinoamérica?

Zombyra se define a sí mismo en su cuenta de Twitter como “Latin American eSports Commentator, League of Legends specialist, Shoutcaster y adicto a la chocolatada”. Se trata de la nueva contratación de Riot Games, un comentarista argentino que recientemente se mudó a Chile, donde el mercado de los eSports le permite vivir de lo que más le gusta: narrar las hazañas de los atletas del nuevo milenio.

VICE: ¿Qué hace exactamente un cronista de deportes electrónicos?

Zombyra: La tarea principal es comunicar, es la palabra clave para esto, sea con emoción, pasión, con datos o estadísticas, pero comunicar y adaptar el vocabulario para que la gente que entiende y no entiende sobre lo que se está hablando pueda disfrutar el relato y el deporte sea ameno.

¿Dónde se estudia para esto?

No se puede estudiar para dedicarse a relatar eSports. Si bien me gustaría y he intentado perfeccionarme con otras habilidades (como respiración, manejo de voz o comunicación social) para tratar de hacer algo que el día de mañana se pueda enseñar, todo va a depender del mercado.Yo empecé a narrar en 2011 pero fue hasta 2013 que comencé a tomármelo en serio y desde ese año no paro de de intentar mejorar y subir el nivel, por lo que venir a Chile para narrar la CLS (Copa Latinoamérica Sur) de League of Legends me ha llevado a reencontrarme y seguir evolucionando, tengo planes de quedarme permanentemente pero eso lo dirá el futuro, si es que mi trabajo gusta al público.

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En el periodismo deportivo hay muchos jugadores frustrados o exprofesionales que dan su punto de vista. ¿Cómo se entra en el mundo de la narración de eSports? ¿Como jugador o desde el lado del periodismo deportivo?

Yo jugaba fútbol y tenis. Cuando tuve que dejarlos por las lesiones me refugié en los juegos online y ahí descubrí un nuevo mundo de competiciones. Comencé como jugador en varios equipos dedicados a juegos de pelea, shooters y moba o estrategia, por lo cual también en mis casteos tengo un gran abanico de improvisación al poder relatar distintos géneros. Nunca hice periodismo ni nada relacionado, pero cuando no pude jugar más a nivel competitivo por falta de tiempo no me quise ir de la escena. Como siempre me dijeron que hablaba muy bien y tenía buena voz, comencé a buscar un lugar para ayudar a la escena desde mi posición de relator.


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¿Se puede vivir de ser relator de eSports?

Sí y no. Empezar probablemente sea un dolor de cabeza y muy difícil, van a pasar años hasta que te hagas un nombre y un piso para poder empezar a ponerle un numero a tu trabajo y poder hacer algo con ello. Mientras estaba en Argentina tenia otro trabajo, sí, pero el cast me dejaba tan buen dinero que a veces me hacía preguntarme para qué tenia un trabajo fijo. En Argentina lamentablemente ser relator y poder trabajar dignamente de eso está lejos aún, por lo que hay ciertos beneficios de estar en dependencia que sí o sí son necesarias para vivir tranquilo. En Chile actualmente solo trabajo como relator, no tengo otro trabajo.

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¿Cuánto gana un profesional en Latinoamérica?

Por motivos de contrato no puedo revelarte esta información, pero es lo suficiente para vivir tranquilo.

¿Le ves futuro a este oficio en Argentina?

Amo mi país y siempre digo lo mismo: si existieran las chances de hacer y crecer como acá, no me hubiera venido a Chile, pero sin dudas a Argentina le falta mucho crecimiento en los eSports y en parte es nuestra cultura también la que traba un poco el desarrollo. La propia escena, en su afán de mejorar a veces se autoboicotea. Las organizaciones son un gran problema. A veces llegué a pensar que contratan a propósito a la gente con mayor índice de fallas en su currículum para hacer las cosas. El amiguismo es una barrera que hay que romper en Argentina, pero como todo, por ahorrar unos pesos se hace cualquiera. Pareciera que mientras un evento tenga principio y fin da igual si en el medio hubo tres incendios. Listo a otra cosa y felices todos. Un poco de revuelo en las redes y ya después la gente de las organizaciones vuelve a apostar por gente que hace mal su trabajo.


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¿Por qué crees que hay muchas menos mujeres jugando y narrando eSports en comparación con la cantidad de hombres que participan?

Es un tema difícil. Hay mucho hostigamiento. La preparación mental es clave para poder romper la barrera, tanto de hombres a mujeres como de mujeres a otras mujeres. Los hombres muchas veces acosan y las mujeres envidian, no es para cualquiera eso y superarlo da sus frutos. Hay muchas chicas que han logrado sus objetivos en el gaming. En los relatos el tono de voz es muy importante: la mujer tiende a los agudos por lo que encontrar una voz amena es mas difícil, pero hay grandes talentos femeninos que podrían mostrarse más.

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¿Cómo definirías tu estilo al micrófono?

Mi rol es el de meterle pasión, si bien fui analista un gran tiempo de equipos o portales y me encanta estudiar los juegos estadísticamente, me incliné por la pasión, porque es algo que no se estudia, lo tenés o no y si alguien lo tiene hay que explotarlo, por eso trato de sacarle el máximo jugo en los moba y los shooters. Antes también comentaba juegos de pelea.


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¿Qué es lo más difícil de tu oficio y cómo combaten el trolleo?

Sin duda lidiar con uno mismo y con el público. Con uno mismo para no estancarse y entender que somos el medio entre un jugador profesional y su juego, y un espectador con su pasión. Una palabra en falso y puedes destruir tu carrera. Una idea, una emoción. Y ahí entra el público. Lidiar con la retroalimentación es difícil. Hay que quedarse sólo con las criticas constructivas y hacer tu trabajo bien, si te dejas llevar por las campanas que suenan te vas a autodestruir.

¿Se levanta más siendo relator de eSports?

La fama y exposición indudablemente ayudan un montón en ese aspecto. Antes el gamer era visto como alguien que no iba a tener sexo o pareja. En la actualidad cada vez más gente se relaciona por distintas redes sociales o juegos online, así que es una cuestión cultural y de aceptación: si bien la gente mayor todavía no entra tanto en esto, es una realidad que a veces es más fácil o seguro conseguir algo jugando un juego desde la comodidad de tu casa que haciendo sociales en otro ambiente.