Agarraos que ahora voy a soltar un topicazo: cuando Messi, o Cristiano Ronaldo, o Zlatan, o cualquier super-mega-estrella-del-copón de un equipo de élite mete un golazo, lo vemos hasta en el postre. Lo ponen en la tele, lo comparten en Facebook, lo pasan por Whatsapp, lo convierten en anuncios, lo bailan en la China y también en Alcorcón.A veces, sin embargo, quien mete el gol no es Leo, ni CR7, ni su Alteza Imperial Ibrahimovic. A veces la inspiración recae en Marcel Ndjeng justo cuando está jugando un amistoso entre el Paderborn alemán y el Bolton Wanderers inglés. Entonces el gol no se pone en la tele, no se comparte en Facebook, no lo pasan por Whatsapp, no lo convierten en anuncios y Juan Carlos le dice por qué no te callas.Pero el golazo sigue siendo un golazo y todos merecemos disfrutarlo igual.