FYI.

This story is over 5 years old.

realidad vs. hollywood

Los hombres blancos no sabían saltar... hasta que Brent Barry ganó el concurso de mates

Y de pronto el chico blanco, flaco y desabrido voló desde la línea de tiros libres.

Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:

En 1992 se estrenó la película White Men Can't Jump un clásico del folclore del baloncesto protagonizado por Wesley Snipes (Sidney Dean) y Woody Harrelson (Billy Ho). En España, fieles a la tradición de adaptar muy libremente los títulos, la película salió bajo el nombre de Los blancos no la saben meter, que no es lo mismo que la traducción literal, que sería Los blancos no saben saltar*.

Publicidad

En todo caso, y volviendo a lo que importa, la historia nos lleva al baloncesto callejero de Los Ángeles, donde Sidney y Billy se dedican a estafar a la gente. Billy, el blanquito, se hace pasar por un tonto que apenas sabe jugar, mientras que Sidney apuesta con los contrarios todo el dinero que quieran y ellos pueden elegir a su compañero. Obviamente, todos eligen a Billy… por ser blanco y vestir una gorra así.

Pero no saben que el blanquito Hoyle realmente juega de maravilla y acaban perdiendo toda su pasta.

Más baloncesto: XXX

En 1996, cuatro años después del estreno de Los blancos no saben saltar*, se llevó a cabo el All Star Game en San Antonio, donde se vistió el que muchos consideran como el mejor uniforme de la historia para un partido de las estrellas. El fin de semana, además, marcó el regreso de Michael Jordan tras su breve paso por el béisbol profesional, e incluso llegaron a robarle el trofeo de MVP a Shaquille O'Neal para dárselo al venerado Mike. Pero esa es otra historia, así que ya la contaremos en otro momento. Lo que nos importa nos traslada al sábado, al concurso de mates que, en esta ocasión, ganó un blanco que sí sabía saltar: Brent Barry.

Igual que con Billy Ho, nadie creía que Barry saldría campeón. Y así como Billy Ho, Barry nos pasó la mano por la cara a todos. El resto de los competidores de ese concurso que, de no ser por Barry, fácilmente pudo ser el peor de todos los tiempos, eran Michael Finley, Greg Minor, Jerry Stackhouse, Doug Christie y Darrell Armstrong. Al ver esta lista, todos hubiéramos optado por Stackhouse o Finley como campeones, o quizás por Christie colándose en la final con algo de suerte. Para la ronda final se clasificaron Barry, Finley y Minor, y el blanquito Brent ganó con una puntuación de 49 sobre los 46 de Finley y los 40 de Minor. Me pregunto si alguien estuvo jodiendo a Barry con este vídeo una y otra vez antes del concurso."¡Escúchame, los hombres blancos no saben saltar!"

Publicidad

Al final, tenemos a dos blancos que ante toda esa adversidad —la de ser blancos— demostraron que en efecto, pueden saltar y la pueden hundir, aunque se rumorea que hasta la fecha Woody Harrelson no sabe que antes de su "épico" mate, la producción bajó el aro varios centímetros. Vaya. En todo caso, creemos que ha llegado el momento de enfrentar a Brent Barry con Billy Hoyle, de comparar la realidad con la fantasía hollywoodiense.

Los mates

1. Billy Ho

Aunque la película tiene varios mates muy buenos, solo podemos tomar en consideración los de Billy Ho. Es decir, uno, este:

2. Brent Barry

Por su parte, Brent Barry cuenta con todo su arsenal del concurso, que fue uno muy bueno. Ahora, esto no implica que sea perfecto, aunque sorprendió a todos imitando a Dr. J y a Michael Jordan saltando desde la línea de tiro libre, cabe resaltar que lo hizo dos veces en el mismo concurso, cosa que además de cutre debería ser ilegal.

El punto, aquí, es para Barry.

Vestuario

1. Esas zapatillas, Billy. ¡Esas zapatillas!

El look de Billy es algo icónico. Bermuda larga, sudadera debajo de una camiseta de "Parental Advisory Explicit Lyrics", la gorra ya mencionada y unos calcetines que harían sentir orgulloso a David Robinson. Sin embargo, todo se le perdona por las zapatillas. Hoyle luce unas Nike Air Command Force deliciosas que prácticamente nos hacen olvidar el resto de su indumentaria.

Vía fundacionmacario.org

2. Barry como niño de escuela

Publicidad

Barry, por otra parte, es sutil pero inolvidable. Se une al selecto club de jugadores que han ganado un concurso sin siquiera quitarse la camiseta de calentamiento, y déjame decirte que los otros miembros del clan no son un chiste: Larry Bird y Kobe Bryant. Pero a fin de cuentas seguimos hablando del uniforme de los Clippers y de un corte de pelo que parece que recién salido de las tijeras de su mamá.

Punto para Hoyle.

Swag

Punto complicado para ambos, y si no hubieran jugado bien al baloncesto dudo que alguien les hubiera ayudado.

Hoyle tiene toda esta aura de estúpido adorable. Es un buen tipo, pero viste fatal, es un apostador compulsivo y siempre antepone el baloncesto a su mujer; por su parte, Barry parece ese primo que siempre va demasiado formal a todos lados y que te da pereza incluir en tus planes para el sábado noche.

Sin embargo, este punto se lo lleva de paliza Brent Barry por algo que no llegó a ocurrir. La idea original que tenía para su última ronda de mates era salir a pista disfrazado de LL Cool J, con su chándal rojo al completo, una cadena de oro y una gorra Kangol mientras sonaba el "I'm Bad" del mismo rapero… probablemente nos hubieran volado los sesos mientras la hundía en la canasta.

Tremendo, un blanco que quería ser visto como negro para machacarla. Desafortunadamente, la liga se lo prohibió y solo podemos fantasear con ese momento de aquí hasta el día que muramos. Piénsalo, sería como si LeBron James saltara a pista al ritmo de "La bamba".

Publicidad

Punto para Barry.

Trashtalking sobre tu mamá

Barry tiene más cara de recibirlos o de estar en el fondo riendo mientras los demás los dicen, y poco más podemos decir.

White Men Can't Jump tiene esto. Durante toda la pelea de trashtalking, con las madres de protagonistas, que desafortunadamente no está online para que la veáis entera, el director de la cinta le pidió a todos los actores que trajeran sus propias ideas y las mejores se quedarían en la versión final. Hubo quienes le pidieron ayuda al famoso rapero Biz Markie para tener chistes infalibles sobre la progenitora de los demás, y el resultado fue espectacular.

Punto para Hoyle... que aunque no aparece aquí, se lo lleva por extensión.

Resultado

Tenemos un empate entre Billy Hoyle y Brent Barry, lo cual es satisfactorio. Ambos la rompieron en sus respectivos rubros y universos ficticios, así que podemos darles un aplauso y disfrutar. Mientras tanto, te invito a ver White Men Can't Jump todas las veces que puedas ya que se anunció que habrá un remake, y nada mejor que ver la original para poder criticar la nueva, ¿no?

Yo momma's an astronaut!