La espléndida racha de triunfos de Cristiano Ronaldo llegó a su fin. Después de tener un año de ensueño, quizás el mejor de toda su carrera, al coronarse bicampeón de la Champions y ganar La Liga con el Real Madrid, y haber ganado la Eurocopa hace un año, entre otras distinciones, Ronaldo no pudo llegar a la final de la Confederaciones a pesar del buen partido que sus compañeros dieron ante Chile.La tanda de penaltis ante los chilenos en la semifinal del torneo debió ser encabezada por el capitán luso, el único con la experiencia y el temple suficientes para motivar a sus compañeros ante las manos imbatibles de Claudio Bravo. En lugar de tomar el balón y colocarlo sobre la mancha de los 11 pasos, Ronaldo mandó a sus soldados, exhaustos, y con el rostro desencajado, como si hubiesen conocido su trágico destino antes de tiempo.De acuerdo con la leyenda del futbol estadounidense, Alexi Lalas, a Ronaldo le dio miedo predicar con el ejemplo y prefirió escudarse en sus compañeros para evitar un posible fallo y la condena de los medios y fans.
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Luego de escuchar una explicación algo redundante y obvia de parte de su colega, Lalas arremetió contra el capitán de Portugal:
Queda claro que CR7 se obsesionó con llevarse el crédito de la supuesta victoria tirando la quinta y última pena máxima, precisamente como lo logró hace un año contra el Atlético de Madrid en la final de la Champions League."Todo se reduce a que tienes uno de los mejores futbolistas que este deporte jamás verá en toda su historia, un tipo que amo y que apoyaré siempre, pero que no sacó la casta en el momento más indicado… Fue una cobardía. No es lo que queremos ver de alguien que no sólo es un líder, sino de un tipo cuyo nombre es mucho más grande que este deporte, más grande que su equipo, y que vive de tirar penaltis, no es como si nunca antes lo haya hecho. Queremos verlo en los primeros turnos [para patear penaltis]".