Golovkin y Jacobs: la noche en la que nadie salió perdiendo

De todas las superficialidades que se le dijeron a los reporteros luego de que Gennady Golovkin defendiera sus cinturones mundiales ante Daniel Jacobs en el Madison Square Garden la noche del sábado, uno sigue siendo verdadero días después de la apretada decisión unánime que vio ganar al kazajo 114-113, 115-112, 115-112. "En realidad nadie salió perdiendo esta noche", dijo el promotor Tom Loeffler en las primeras horas del domingo.

Como director de operaciones de K2 Promotions, empresa que representa a Golovkin, Loeffler es consciente que debe ajustar la verdad conforme a los intereses de su cliente.

Luego de que terminara su racha de 23 nocauts consecutivos, Golovkin (37-0, 33 nocauts) demostró por primera vez que puede ganar una pelea de 12 rounds en las tarjetas. También demostró que es capaz de derrotar a un mediano de élite con poder en los puños.

El campeón wélter de la FIB, Kell Brook, se vio en óptimas condiciones cuando subió dos divisiones en septiembre para enfrentar a Golovkin, y mantuvo una ligera ventaja en las tarjetas cuando la pelea terminó en el quinto episodio, pero no le provocó daños significativos al kazajo. Por su parte, "Triple G" fracturó el orbital del ojo de su rival, provocando que se detuviera la contienda.

Por supuesto, Jacobs no es un peso wélter. No sólo tiene poder de élite para ser un peleador mediano (32-2 con 29 nocauts) sino que después de pesar 159.8 libras el viernes, el oriundo de Brownsville, Brooklyn, no se presentó al pesaje exigido por la FIB el sábado por la mañana, pesaje que tenía el propósito de verificar que ambos boxeadores estuviesen dentro de las 10 libras del límite de peso requerido. Mientras Golovkin pesó 169.6 libras la mañana del domingo, no hubo forma de saber cuánto pesó Jacobs cuando subió al ring.

Algunos informaron que Jacobs subió con 178 libras o más. Golovkin no se quejó, y en su lugar se dedicó a elogiar a Jacobs como uno de los mejores boxeadores a los que se ha enfrentando, a pesar de la supuesta ventaja en el peso.

"Es mi rival más difícil", dijo Golovkin. "No pude acabarlo. Es un peleador muy bueno. Fue mi primera prueba de 12 rounds". Como si esto no fuese suficiente, Golovkin también comentó que su rival de 30 años y sobreviviente de cáncer es su "boxeador favorito".

Quizá haya sido la primera vez que Golovkin, quien nunca ha sido noqueado como boxeador profesional o amateur, se vio incómodo sobre el ring. Por lo general se le ve sudando en las entrevistas al final de sus peleas, pero esta vez la cara de Golovkin estaba roja y un poco hinchada. Las marcas fueron prueba de la fuerza que Jacobs mostró durante toda la pelea.

Incluso después de haber sido noqueado en el cuarto round, Jacobs pareció hacerse más fuerte en el 10 y 11, cambiando de guardia en ocasiones y usando su jab derecho para generarse espacio.

De acuerdo con CompuBox, Jacobs conectó 144 golpes de poder y Golovkin 126. Y aunque "Triple G" superó a Jacobs en jabs, 105 a 31, la pelea del sábado fue difícil de calificar.

"Después de la caída le dije que tenía que matarme", dijo Jacobs. "Cuando me levanté, me pregunté si eso era todo lo que tenía [en los puños]. Hubo varias veces durante la pelea que me fajé porque supe que podía. Me levanté y creí haber ganado la pelea… Todo lo que puedo hacer es aceptar la decisión".

Perdió, pero Jacobs se ganó la oportunidad de la revancha (Golovkin dijo estar abierto a la idea). Y también el respeto de los aficionados al boxeo, ya que fue el primer boxeador que le dio batalla a Golovkin, golpe por golpe.

"En ocasiones, me paré frente a frente para ver qué tan cierto era lo se decía de él, y no me fue mal", añadió. "Gané muchos fans con esta pelea, y veré qué me depara el futuro".

Dicho futuro es muy probable que dependa del camino que Golovkin tome. Loeffler mencionó que "Kazajistán quiere que pelee ahí" antes de hablar del campeón mediano de la OMB, Billy Joe Saunders, y el poseedor del cinturón superwélter de la OMB, Saúl "Canelo" Álvarez.

Esto abre la posibilidad de una pelea de unificación contra Saunders en Kazajistán en junio antes de pelear por una bolsa mayor ante el Canelo a principios del siguiente año. Desde luego, todo depende de que el Canelo derrote a Julio César Chávez Jr. en Las Vegas este mayo.

"No hay nada concreto", dijo Loeffler cuando se le preguntó sobre la pelea de unificación ante Saunders. "Está dispuesto a unificar los títulos y también que quiere la pelea con el Canelo. Veremos quién de los dos decide subirse primero al ring".

Cuando sea que Golovkin suba al cuadrilátero de nuevo, seguirá siendo considerado el mejor peleador del mundo libra por libra.

Esta distinción pertenecía a Román "Chocolatito" González (46-1, 38 nocauts) antes de que la leyenda de Nicaragua sufriera una sorpresiva derrota ante el tailandés Srisaket Sor Rungvisai (42-4-1, 38 nocauts), quien ganó la polémica decisión mayoritaria y el cinturón supermosca del CMB de su rival en la cartelera co-estelar.

Después de ser noqueado en el primer round, González pareció recuperar el control de la pelea en los 11 rounds restantes, e incluso se benefició de la penalización de un punto contra Rungvisai por un cabezazo.

González fue más activo que Rungvisai, ya que conectó 441 golpes y su rival 284, incluyendo una ventaja de 372 a 277 golpes de poder.

De todas formas, Rungvisai sorprendió a los 19,939 asistentes —la gran mayoría con banderas de Nicaragua— luego de convertirse en el segundo boxeador en mandar a la lona a González y, por supuesto, el primero en derrotar a "Chocolatito".

"Estoy un poco golpeado pero creí haber ganado la pelea", dijo González. "Quiero la revancha inmediatamente para recobrar mi cinturón".

Por más decepcionado que González esté por la derrota, no es el fin del mundo para su carrera. Antes de su pelea del sábado, el campeón mundial en cuatro divisiones diferentes era visto como imbatible. Ahora, Rungvisai le ha dado vida a la visión supermosca, casi siempre pasada por alto por el público. Después de la sorpresiva y sangrienta derrota, tal vez haya una audiencia más grande cuando estos dos decidan subir juntos al ring.

En este sentido, nadie salió perdiendo de la cartelera del sábado con excepción de los protagonistas de las peleas estelares.