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Artes marciales para dummies: cómo noquear a cualquier listillo sin pelear

Si quieres conocer las técnicas más efectivas de las artes marciales... bueno, ponte a aprenderlas. Si en cambio quieres echarte unas risas viendo a charlatanes haciendo el ridículo, este es tu artículo.

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¿Quieres mejorar tu grappling sin pasar más tiempo en la lona? Francamente llega un día en el que no aguantas más el pelo que se te mete en la boca cada semana: de bigote, de pecho… o quizás algo peor, ¡ugh! Podrías levantar pesas, hacer entrenamiento cardiovascular o trabajar en tu flexibilidad, pero eso requiere demasiado tiempo y esfuerzo.

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Si eres como yo, lo que quieres es un tipo de conocimiento que puedas adquirir durante el trayecto al trabajo —algo del estilo 'para dummies'— y usarlo instantáneamente para someter a cualquier listillo que se cruce en tu camino —incluso si resulta ser un cinturón marrón por casualidad.

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La leyenda del karate Ticky Donovan me comentó en una ocasión que cualquier movimiento que puedas dominar en cinco minutos no sirve para nada contra un rival experto, porque cualquier otra persona podría aprender lo mismo en cinco minutos: en este caso decidí no hacerle mucho caso a Donovan y consultar a mi otro gurú para estas cosas, el 'magnífico' George Dillman.

Dillman es el yin de mi yang: cada vez que habla, sube el pan, y cada vez que propone algo, suele provocar la más absoluta hilaridad entre los expertos en artes marciales. Cuando National Geographic desacreditó totalmente el nocaut sin golpe de Dillman en televisión frente a millones de personas, él sencillamente se encogió de hombros.

Dillman sencillamente explicó que el sujeto había movido los pies y luego volvió a dar seminarios, donde sigue ganando miles de dólares gracias a sus devotos seguidores. El hecho de que la ciencia demostrara la falsedad de sus métodos no le importó demasiado, ya que para él la fe de la gente es lo que decide si una técnica es buena o no.

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Desafortunadamente, Dillman no ha investigado mucho las técnicas de grappling que nos ocupan hoy, aunque sí que nos enseñó un golpe de nariz para usarlo —sobre el papel— en situaciones de riesgo de violación.

Tras contemplar este… er, espectáculo, decidí consultar el trabajo del Dillman británico, Paul Bowman. Alumno de G-Dilly, Bowman viene en forma de pack con su uke [la persona que recibe sus ataques en las demostraciones], un sexto dan en kyusho que demuestra que cuanto más experto te vuelves en el arte, más vulnerable eres ante el mismo. Este nocaut por punto de presión es trágico:

Como aficionado de los agarres de cuello y ávido usuario de las guillotinas, me emocionó ver que Bowman solo usa su mente para mandar al oponente al suelo.

Normalmente hay mucha lucha para conseguir una posición de control y un agarre por los hombros o el cuello cuando quieres llevar a alguien al suelo —y tu oponente tampoco se va a dejar caer fácilmente—. Sin embargo, parece que con llevar los pulgares a un punto concreto del cuerpo que Bowman llama Stomach 9 puedo hacer que mi oponente caiga de rodillas sin esfuerzo alguno.

Ese lugar llamado Stomach 9 se está convirtiendo rápidamente en mi punto favorito de grappling.

Pero Bowman no tiene suficiente con eso; el británico principalmente lidia con aspectos de defensa personal de los kyusho [puntos vitales], así que dedica muchas de sus enseñanzas a defenderse contra el terror de las calles, el puñetazo directo (straight punch).

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Comencé a investigar un poco sobre los exalumnos de Dillman: seguramente alguno de ellos habría salido del círculo y habría empezado a producir asesinos en serie. Dillman aseguró en una ocasión que si el boxeador estadounidense Wommy Hearns hubiera entrenado con él, hubiera derrotado a Marvin Hagler, que durante años fue el mejor de su categoría.

Yo también quiero saber hacer algo de eso, pero en grappling.

Fue entonces cuando me topé con el trabajo de Evan Pantazi, un séptimo dan supuestamente formado por Dillman. Los vídeos de Pantazi son numerosos y muy informativos: ya solo la portada te promete más de lo que estás pagando por él.

La obra Kyusho Jitsu Grappling Methods de Pantazi —que consta de siete volúmenes en DVD— asume que el oponente conoce técnicas de grappling, aunque de una manera en la que ningún grappler experimentado enseñaría nunca. Así que, en consecuencia, hay mucha defensa y se aplican muchas palancas (armbars) como ésta:

Claramente esto no puede ser exclusivo para la autodefensa, porque Pantazi lidia con agarres de Gi [uniforme de artes marciales] clásicos estando de pie y muestra ese punto de presión detrás del codo que todo maestro de kyusho usa constantemente, ya que en realidad duele un poco.

Y aunque casi un tercio de los vídeos están dedicados a mostrar técnicas cuando se está debajo del atacante —un lugar sensible para empezar—, Pantazi se desvive por encontrar puntos de presión cuando su oponente le tiene agarrado por el cuello y está encima suyo: de hecho, tiene mil ventanas de oportunidad para aplicar otras técnicas, pero Pantazi no parece darse cuenta siquiera.

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Veamos algunas de las mejores perlas de Pantazi. Aquí, si tu oponente acomoda la cara en tu pecho desde la montada o la guardia, él decide usar los nudillos para golpearlo en la parte superior de la cabeza. Según él, este un punto vital poderoso que puede dar pie a que la posición se invierta… aunque lo más probable en la vida real es que te envíen a la oficina del director por "exceso de payasadas".

Pantazi también tiene unas ideas interesantes sobre las llaves de piernas. Mis días en el karate me dejaron con el deseo de controlar la distancia en todo momento y solo intercambiar golpes en posición aventajada; por eso nunca me gustó atacar las piernas de mi oponente para aplicar una llave.

Pantazi, en cambio, me mostró una nueva manera de atacar los pies desde una distancia enorme: a eso hay que añadir el golpe estilo cobra al punto vital que se encuentra debajo de la rodilla… y el artista marcial tradicional que llevo dentro está más que satisfecho.

Ya me estoy imaginando lo que estás pensando: "¿Y qué pasa con la otra pierna? Está libre para agarrarte, empujarte o cualquier otra cosa"… Cálmate sabelotodo, solo es una demostración. Pantazi deja claro luego que en una aplicación real de la técnica debes colocar el pie sobre la pierna del tipo dejándola sin movimiento.

Su bloqueo de rodilla es bastante hilarante, en realidad.

La mayoría de las técnicas de Pantazi parecen aplicaciones bastante cuestionables: llaves en las articulaciones, golpes con las yemas de los dedos en el cuello del oponente estando en inferioridad… no había señal alguna del famoso Stomach 9 que otras autoridades del kyusho usan tanto, algo que me decepcionó porque cada vez me salía mejor.

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Pero luego Pantazi sacó a otros alumnos para luchar y vi una defensa tan efectiva que tuve que frotarme los ojos. Saulo Ribeiro ha afirmado que la esencia del jiu-jitsu es sobrevivir y escapar, y estos tipos trabajan con una tasa de éxito del cien por cien.

De acuerdo, la verdad es que estaba buscando métodos rápidos para someter a tipos que han pasado más tiempo que yo en el tatami y Pantazi no solucionó mi búsqueda: eso sí, sus técnicas anti-grappling son de lo mejorcito —en términos de diversión, claro— que yo haya visto jamás.

Las técnicas de escape y los barridos de Pantazi, que se pueden aprender en cinco minutos o menos, suenan como una buena manera de subir un poco el nivel: ya si eso después me dedicaré a rellenar algo mi faceta ofensiva con algo que requiera entrenamientos de verdad. Oh, y quién sabe… tal vez con algo de práctica pueda cazar a alguien con una llave kyusho con la técnica del talón desde su posición de sentado.