FYI.

This story is over 5 years old.

deporte contra mafia

En Italia, las mujeres futbolistas desafían a los sicarios de la mafia

En el sur de Italia, dedicarse al fútbol femenino no es fácil... pero entre la oscuridad, hay luces de esperanza. La historia del Sporting Locri, un equipo de fútbol sala de Calabria, es un ejemplo de cómo se puede vencer al medio y al sexismo.
Todas las imágenes proceden del Facebook del Sporting Locri

Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:

Antes de empezar hay que decir que en un país como Italia una amenaza anónima puede dar mucho más miedo de lo que podríais pensar, especialmente en el sur. En la región de la Calabria —lugar de origen de la organización criminal llamada 'Ndrangheta—, una zona tan llena de belleza como de la llamada 'malavita', el miedo de acabar lastimado por algo que podría tranquilamente ser una tontería se hace real y vibra en las venas de quien no puede defenderse.

Publicidad

Más deportes: Hockey femenino sobre hielo… ¿en México?

El fútbol femenino italiano sufre por crecer y hacerse un hueco a nivel europeo y mundial. Los resultados de los últimos años de la selección femenina no han sido demasiado gloriosos; esto por supuesto tiene muchas causas, entre las cuales seguramente figure el insuficiente empuje de los medios de comunicación.

Y si en el norte ya es difícil que el fútbol femenino triunfe, en las realidades del sur de Italia todo es aún más complicado.

El próximo 10 de enero, sin embargo, el italiano medio que se ponga frente al televisor para ver la RAI —la televisión pública italiana— se encontrará con una sorpresa: en vez de partidos de la Serie A, la primera división italianade fútbol, el canal RAI Sport 1 emitirá un partido de fútbol sala entre los equipos femeninos del Sporting Locri y de la Lazio.

El porqué de esta decisión de la RAI es largo de explicar, aunque cuando se habla de 'mafia y amigos' en realidad todo es muy simple. Todo empezó el pasado 7 de diciembre, cuando una nota intimidatoria apareció en el parabrisas del coche del presidente del equipo de fútbol femenino Sporting Locri, Ferdinando Armeni. Según recoge el periódico italiano Il Corriere della Sera, papel solo llevaba escrita una frase tan simple como aterradora: "Hay que cerrar el Sporting Locri".

¿Cómo debía tomarse eso?

El presidente Armeni lo consideró una broma de mal gusto, y probablemente también nosotros lo habríamos hecho en su lugar. Cualquier listillo podría haber dejado la nota para después largarse corriendo y riendo estúpidamente.

Publicidad

Sin embargo, poco después llegó una segunda amenaza con exactamente el mismo formato, y después una tercera. Tanto Armeni como el club entero empezaron a temer que la cuestión fuese más allá de una broma pesada y que detrás de aquellas notas hubiera alguien realmente peligroso.

Sin embargo, ¿quién podría querer que se cierre un equipo de fútbol sala femenino? No lo sabemos: los propios integrantes del Sporting Locri tampoco.

"Conozco los problemas, las personas, y las maneras de hacer de la mafia, y sinceramente creo que la 'Ndrangheta no tiene nada que ver con todo esto. Pienso que en realidad sea iniciativa de algún bestia misógino que considera que la existencia de un equipo de fútbol femenino es una vergüenza", escribió una simpatizante del Sporting Locri en Facebook.

Las notas encontradas en el coche de Armeni no solo eran todas iguales: también aparecían siempre en el mismo lugar —precisamente delante de donde el presidente del Locri suele sentar a su hijo pequeño, que apenas tiene tres años. Quien dejó las notas lo sabía perfectamente: de hecho, a Armeni le llegó una cuarta nota donde lo dejaba todo bien especificado.

Tal vez no se haya dado usted cuenta de que tiene que cerrar el Sporting Locri si no quiere sufrir las consecuencias. Sabemos quién suele sentarse en este lugar

Como es comprensible, Ferdinando Armeni decidió dejar inmediatamente el cargo de presidente del Sporting Locri. En ese momento se temió que el club entero desapareciera.

Publicidad

#SportingLocri, le ragazze tornano in campo dopo le minacce. #Tavecchio sarà presente all'incontro https://t.co/hFmEzKqObl
— LaGazzettadelloSport (@Gazzetta_it) 4 Gennaio 2016

Para saber mejor de lo que estamos hablando, cabe decir que el Sporting Locri es un equipo de fútbol sala que juega en la primera división del deporte femenino en Italia. El Locri logró la segunda posición en el grupo C de la Serie A del futsal femenino en la temporada 2013-2014; este año juega en el grupo B de la Serie A Elite, un campeonato que acaba de nacer y donde juegan los 16 mejores equipos del país.

En su plantilla, el Locri dispone de 15 jugadoras de edades comprendidas entre los 15 y los 31 años de edad, entre las cuales destaca la española Lioba Bazan (ex jugadora del Sala Zaragoza), que en esta campaña lleva 15 goles en 10 partidos. También el entrenador, Willy López Lapuente, y dos jugadoras más son de nacionalidad española.

"Todavía no tenemos muy claro quién es el responsable de las amenazas y tampoco sabemos el porqué del gesto. Puede ser que se trate de celos, pero está claro que algo se ha roto y no puedo seguir con serenidad un proyecto de origen 'familiar'. Así es difícil seguir. El Locri volverá a jugar, pero con otros dirigentes", declaró el pasado 4 de enero el presidente Armeni a SkySport, con palabras claras y firmes.

Este es, pues, el fin de la aventura de Armeni al frente del Locri, pero ni mucho menos el final del club. Giovanni Calabrese, alcalde de Reggio Calabria, asumió temporalmente la presidencia del club: su misión principal será buscar patrocinadores a partir del 10 de enero, cuando el partido entre el Locri y la Lazio se emita en la RAI.

Mediante el soporte de organizaciones como la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) y el Comité Olímpico Italiano (CONI), que han mostrado públicamente su rechazo a las amenazas, Calabrese espera conseguir los ansiados sponsors que aseguren la supervivencia del club a largo plazo.

Si la intención de los autores de las notas era simplemente hacer daño al presidente Armeni, seguramente a día de hoy estén satisfechos de su asqueroso trabajo. Si, por otro lado, la intención era destruir el Sporting Locri, lamentamos decirles que han provocado exactamente todo lo contrario. Sea porque son parte de alguna organización mafiosa o sencillamente unas "bestias misóginas", lo cierto es que han fracasado en su empeño de acabar con el club calabrés.

Este domingo 10 de enero, y sea cual sea el resultado del partido entre el Locri y la Lazio, el fútbol sala femenino habrá vencido al miedo.

Sigue al autor en Facebook: @nicolerebo